madrid. El PSOE ha optado por el Senado para abrir los trámites de la prometida reforma constitucional a partir de septiembre. El portavoz parlamentario socialista, Diego López Garrido, afirmó que el informe que aprobó el pasado mes de febrero el Consejo de Estado "se trasladará" a la Cámara Alta para que a partir del próximo mes "debata la reforma".El máximo órgano consultivo aprobó el pasado 16 de febrero el informe que le encargó el Gobierno para modificar la Carta Magna en cuatro aspectos: la sucesión a la Corona, el encaje en la Constitución de la entrada de España en la UE, la denominación de las Comunidades Autónomas y la reforma del Senado.Días después, el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, se comprometió a iniciar en septiembre una ronda de contactos con todas las fuerzas para explorar si existían condiciones suficientes para abordar esta iniciativa, para la que se requiere el concurso necesario del PP.López Garrido circunscribió en el Senado el inicio de estos contactos. "Al llevar el informe al Senado, ahí están los grupos parlamentarios. Ahí se producirán las discusiones y nos parece un lugar muy adecuado porque, de todas las reformas propuestas, la más amplia es la relativa a la Cámara Alta", declaró a EP. Eso sí, indicó que el "proyecto o proposición de Ley" que canalice la reforma "tendrá que ir al Congreso y luego al Senado".El dirigente socialista subrayó además que el PSOE quiere que haya una reforma constitucional "con todos los grupos y especialmente con el PP en los cuatro puntos comprometidos". Los socialistas no se plantean otras reformas ni tampoco "fragmentar" las cuatro propuestas. A su juicio, ni siquiera la sucesión de la Corona corre prisa ya que el problema sólo surgiría si el Príncipe Felipe fuera Rey.