MADRID. Goethe (188), Leibniz (183), Calderón de la Barca (170), Velázquez (170), Einstein (162), Galileo (163)... y Ramón Campayo (194). No, no nos estamos refiriendo a la estatura de estos célebres personajes, ni al número de horas al mes que dedicaban a pensar o a crear; más bien nos referimos al cociente intelectual (CI) de cada uno de ellos. Y, entre todos, destaca un nombre: Ramón Campayo, autor de Desarrolla una mente prodigiosa y Aprende un idioma en siete días. Es, a juzgar por los récords mundiales conseguidos, la mente más rápida del mundo. Un verdadero genio. Pero, por encima de todo, Campayo es un emprendedor: ha hecho de su habilidad todo un negocio. "Yo prefiero decir que, a través de la memorización, estamos logrando revolucionar el mundo". Sin embargo, se enfada cuando piensa en los políticos: "No les interesa hacer las cosas bien. Si enseñaran estos métodos a los niños, sería muy bueno para ellos. Por ejemplo, una persona normal podría multiplicar su capacidad de lectura por tres o cuatro". Desde luego, sus propias cualidades son asombrosas. Es capaz de leer 4.000 palabras en un solo minuto. Para hacernos una idea, el último libro que ha leído ha sido La buena suerte que, con 150 páginas, le ha llevado tan sólo 15 minutos. "Realizo una lectura fotográfica. Hago una foto del renglón y, aunque esa información se mantiene muy poco tiempo en la memoria, al encadenar renglones, puedes seguir la secuencia de la información", aclara. Aprender un idioma en 7 horasEn su último libro, Ramón Campayo nos enseña la manera de aprender un idioma en un tiempo prodigioso. Pero, ¿cuántos idiomas habla él? "Depende del día", asegura Campayo. "Cuando hago un viaje en avión, consigo llegar defendiéndome al lugar al que viajo. Así hablo 15 idiomas y, perfectamente, unos cinco o seis". En su libro afirma que aquellos que apuesten por su método lograrán hablar cualquier idioma en siete días. "Es cierto, incluso podríamos haber dicho en siete horas porque no es necesario dedicar más de una hora al día". De momento, este revolucionario libro lleva vendidos 40.000 ejemplares en tres semanas y actualmente está agotado porque, según su autor, funciona. "Hace pocos días recibí la carta de una mujer mayor que, gracias a esta fórmula, ha logrado hablar por teléfono con su familia en Alemania. Ha conseguido comunicarse después de muchos años intentándolo. Estaba realmente agradecida". Y, aún hay más, "tengo alumnos que están aprendiendo siete idiomas a la vez. Y los aprenden y se defienden", asegura. Dicen que el ser humano, si lograse desarrollar el 100 por ciento de sus capacidades mentales, podría llegar a mover montañas: "Sí, sin duda. El pensamiento es creador. Si una persona pensara algo con la suficiente fuerza y el tiempo necesario , es muy posible que lo consiguiera". Entonces, ¿dónde está la limitación? "La preocupación es el sentimiento más dañino para el ser humano y actualmente es nuestro mayor limitador", afirma. "Vivimos en una sociedad muy competitiva, en la que se nos exigen resultados inmediatos, pensar en cosas que todavía no han ocurrido. Cuando existe la posibilidad de obtener un resultado que no es el favorable, surgen los miedos y los bloqueos mentales". Según Campayo, la memorización tiene sus técnicas, se puede perfeccionar. ¿Cuántas veces nos hemos encontrado con alguien por la calle y hemos sido incapaces de recordar su nombre? Para evitar ese tipo de situaciones tan frecuentes, también podemos utilizar algunos truquillos. "Nuestra mente funciona por asociación de imágenes. Tienes que buscar un rasgo, algo que llame tu atención en esa persona, y asociarlo con el nombre. Se llama asociación inverosímil". En realidad, para Campayo la memoria es la esencia del ser humano, "es tan importante que funciona de manera automática, memorizamos constantemente. Imagínate que no fuéramos capaces de retener ningún tipo de información... No podríamos hablar, ni andar, ni nada. Estaríamos perdidos, no podríamos vivir". Para él, "el secreto es la confianza".