Las comparativas hacen más objetiva la percepción que la compañía tiene de si mismaA partir de 3.000 euros su empresa puede medirse con las 'iguales' de su sectorbarcelona. ¿Cuántas veces ha pasado por un negocio situado frente al suyo y ha pensado... "¿qué hacen bien que yo no consigo en mi empresa"? Considérelo envidia sana pero sepa que ahora esta pelusa puede desaparecer si compara el funcionamiento de esa empresa con el de la suya. Los empresarios españoles tienden a pensar que la comparación es fruto de algún extraño afán por copiar, pero en realidad "deberían entender que la comparación es positiva. En los países anglosajones, comparan todo como aprendizaje", asegura Ignacio Echegoyen, director de Consultoría de PriceWaterhouseCoopers (PWC).La comparación como herramienta de gestión y de mejora de la productividad de las empresas se conoce en la jerga empresarial como benchmarking, aunque en España todavía lo utilizan muy pocas empresas, "seguramente no pasa ni del uno por ciento las que lo consideran una herramienta eficaz para aprender de las otras y mejorar", afirma Gerard Costa, profesor de Dirección de Marketing de Esade. Los beneficios que aporta, aseguran los encargados de elaborar estas comparaciones, son varios. Por un lado permite a la compañía comprobar la salud de los procesos que se llevan a cabo dentro del negocio y, por otro, ayuda a identificar las áreas con potencial de mejora dentro del sector en que se funciona. La condición sine qua non para encargar una comparativa es no tener miedo a descubrir las verdades que puedan florecer. Su empresa será puntuada en cada uno de los aspectos que haya encargado, pero aprobar o suspender dependerá de la calificación que obtengan las otras compañías con las que se compare. Los datos que obtenga le ayudarán a situarse dentro del sector y mirar a la competencia cara a cara no como en un duelo del antiguo Oeste sino para, directamente, copiar sus mejores prácticas.Corregir el camino El benchmarking es una evaluación continua en la que cada alumno o empresa sabe en qué posición ha quedado en comparación con sus compañeros de la misma clase o sector, pero no sabe qué puntuación ha tenido cada uno de ellos. "La confidencialidad es esencial para no desvelar los datos claves y desatar la competencia desleal entre las empresas", reconoce Echegoyen. Según las consultoras que se dedican a elaborar estas mediciones comparativas, en España las empresas buscan medirse sobre todo en costes y en eficiencia de la función financiera, y son pocas a las que les preocupa comparar sus estrategias de publicidad y marketing asustadas por los datos que puede desvelarse. Desde PWC aseguran que las filtraciones "son imposibles" y que ya existen multas millonarias estipuladas en caso de que suceda algo parecido. Es la propia empresa la que, a partir de 3.000 euros, puede encargar uno de estos estudios en el que se reflejará además la dirección que toma el sector. Un ejercicio muy útil ya que puede que el camino que usted haya diseñado para su empresa no sea tan rentable como había planeado y sea el momento de corregir. Los benchmarking pueden ser puntuales o realizarse cada ejercicio económico. Los expertos aseguran que es mejor no exagerar y creen que dos años es el tiempo que debe esperar para volver a enfrentarse a sus iguales. Los trabajadores deben conocer los resultados de las comparativas ya que "les ayudará a valorar su trabajo día a día. Verán cómo hay empresas que aplicando lo que la suya está a punto de aplicar, han conseguido excelentes resultados". Costa explica que no hay por qué inventar nada ni gastarse enormes cantidades de dinero en buscar soluciones, "cuando casi todo está inventado y seguramente alguien ya lo ha aplicado con éxito. Es cuestión de perder el miedo y ver que la comparación mejora la productividad y permite ahorrar".