En el 'II Congreso Nacional de Periodismo Autónomo y Freelance' se debatió sobre las distintas herramientas de las plataformas sociales y su repercusión en el mundo del 'ciberperiodismo 3.0'En una época como la actual, el profesional de la comunicación debe adaptarse a las exigencias que va imponiendo el gran impacto de las redes sociales, consideradas esenciales, incluso para la comunicación personal. El periodista que trabaja en un medio de comunicación y el que se está formando académicamente se enfrentan al desafío de lograr ser un eficiente cibercomunicador 3.0. La Asociación de Profesionales de la Comunicación (Procom) organizó varias charlas para abordar cuestiones como la naturaleza de los Social Media -conjunto de redes sociales dentro del marco de Internet-, y el paso del periodismo 2.0 a la versión 3.0, en la Facultad de las Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid En el encuentro participaron en calidad de ponentes Juanma Romero, editor de informativos del canal 24 horas de Televisión Española y fundador de Hazte Visible -empresa dedicada a la enseñanza de técnicas de comunicación periodística- y Adicciones Digitales; el director de Marca, Comunicación y Publicidad de Cetelem España, Joaquín Mouriz; y Salvador Molina, Presidente de Procom. Este último enfatizó en la repercusión que está teniendo Internet en el periodismo, cuyo destino en los formatos impreso y televisivo puede alcanzar su fin en un plazo de diez años, motivado entre otros aspectos por la ocupación del 80 por ciento que la Red acometerá sobre el tráfico de datos audiovisuales pertenecientes a la pequeña pantalla en un plazo máximo de dos años -datos emitidos por la entidad Procom-. La conferencia Hazte visible, sirvió para que los ponentes mostraran sus conocimientos acerca del ciberperiodismo 3.0 y su relación directa con las plataformas sociales a los asistentes, en su mayoría alumnos de la propia facultad. Cuidar la imagen en la Red En esta charla se hizo mucho hincapié en la necesidad de que los profesionales de la comunicación cuiden lo que dicen, lo que hacen, los archivos que suben y los que descarguen, debido a que numerosas empresas que tengan intención de contratar los servicios de algún canditato determinado, algún comentario o foto vista en su perfil social puede desechar tal posibilidad. En este sentido, Juanma Romero explicó que "la imagen es fundamental, ya que lo que se escriba en nuestras redes sociales posiblemente permanecerá para siempre en sus archivos. A la hora de buscar profesionales, las empresas prestarán especial atención a nuestros comentarios y archivos"; por consiguiente, a las redes sociales hay que considerarlas como esenciales para el cibercomunicador, y la comunicación personal también lo es". Asimismo, destacó que estas comunidades virtuales "ayudan a contrastar fuentes de información, que no tienen por qué ser sólo profesionales, también espontáneas y externas al periodismo". Por lo tanto, puesto que "Internet es una herramienta muy importante a día de hoy, y no se sabe que pasará mañana, es importante que el ciberprofesional tenga previsto un plan A, incluso un B y un C, porque nadie tiene el futuro asegurado en este terreno". Mouriz, por su parte, defiende la idea de que "Internet no es enemigo de las redes sociales, y éstas tampoco lo son del mundo de la comunicación", y Romero la comparte, añadiendo que la "la Red añade un factor extra a la competitividad empresarial, como es el caso de tener perfil en la red profesional Linkedin, Facebook o algún canal en Youtube". De esta forma, las posibilidades laborales aumentan, sobre todo si se hace por interés profesional. Salvador Molina explicó en esta conferencia impartida en la Universidad Complutense que "la socialización de la información es uno de los ingredientes de la nueva realidad del mundo de la comunicación; por lo tanto, ya no es suficiente con tener curiosidad, hay que apostar por algo, desafíos y retos como puede ser la búsqueda de una marca personal por parte del periodista". El presidente de Procom comentó recientemente a elEconomista que "vivimos en un proceso de reconversión en el periodismo; se está reinventando su papel de intermediario entre información y medios de comunicación; ha evolucionado en tantas vertientes, que su impacto se puede equiparar al que produjo la creación de la imprenta de Gutenberg". Molina defiende al ciberperiodista que logra adaptarse al impacto que están produciendo las redes sociales en el mundo de la información. Esta rama "no es fácil de asentar, pero unida a la masiva creación de empleo que está generando la nube -150.000 nuevos puestos en España- y el periodismo freelance, puede garantizar un futuro prometedor para el sector". "No es que haya que cambiar, es que ya estamos viviendo el cambio. Es hora de que el periodista del mañana cuide su perfil profesional en la Red, creando su propio social media y sin renunciar a la deontología", apostilló.