El presidente de Infosys, Nandan Nilekani explicó el potencial económico que representa la IndiaMADRID. "Con la apertura de la India y China, más de 2.000 millones de personas han pasado a formar parte de la economía global", así de rotundo se mostró Nandan Nilekani, presidente de Infosys, para explicar el impacto económico que tiene el despertar al libre mercado de los dos gigantes asiáticos. Durante algo más de una hora, el empresario indio se convirtió en el mejor embajador de su país en España. Llegó invitado por el BBVA. El anfitrión del acto fue Francisco González, presidente de la entidad, y de él fue la responsabilidad de presentar a una de las 25 personas más poderosas del mundo, según la revista Fortune. "Es un excelente ejemplo de una nueva línea de empresarios que está cambiando su país", afirmó Francisco González. Inició la charla hablando de Historia, de los acontecimientos cruciales que desembocaron en la apertura económica de la India. "El año 1991 supuso un punto de inflexión. Atravesamos una violenta crisis en nuestra balanza de pagos, sólo teníamos reservas para realizar los intercambios internacionales durante dos semanas más. Aquello pasó y salimos fortalecidos. Se abolieron las licencias industriales que impedían una actividad empresarial normal, se llevó a cabo la reforma del marco fiscal, del mercado de capitales, de la banca" . Ese año marcó un cambio. Fue en ese momento cuando se empezó a potenciar la industria del software. "El gobierno se dio cuenta de que la India se podía convertir en el mayor productor de software del mundo. Decidieron crear zonas económicas específicas, parques tecnológicos con beneficios fiscales, sin aranceles a la exportación tecnológica y donde se podía hacer uso de la tecnología implantada para contactar con nuevos clientes", explicó Nandan Nilekani. Así, si en 1991 las exportaciones totales de esta industria eran de 50 millones de dólares, actualmente alcanzan los 23.600 millones, cifra que esperan duplicar hasta 2010.Infosys es un buen ejemplo de este despegue. En 1991 tenían 200 trabajadores y un volumen de negocio de dos o tres millones de dólares. En 1999, ya era de 121 millones. La cifras han seguido aumentando: 1.000 millones en 2004 y 2.000 en marzo de 2006, duplicaron el volumen en sólo dos años. Tienen previsto seguir creciendo y, para finales de año, alcanzar los 2.800 millones de dólares. En cuanto al número de trabajadores, actualmente cuentan con 50.000 y tienen previsto contratar a otros 25.000 más, "para ello tendremos que revisar 1.400.000 solicitudes". ¿Cómo lo han conseguido? "La distancia se ha convertido en inmaterial y el modelo empresarial clásico se ha superado. El 30 por ciento de nuestros empleados están cerca del cliente pero el resto está dentro de esa red global que puede operar desde cualquier sitio", explicó Nandan Nilekani. "Así podemos utilizar un puesto en Boston y llevar a cabo el trabajo en cualquier otra parte del mundo. Han desaparecido las fronteras y nosotros hemos creado una ventaja competitiva. Es más rápido y más barato, nos permite crecer mucho más". No quiso dejar las críticas de lado, "las infraestructuras tienen que mejorar, la inversión es sólo del 4 por ciento del PIB". También hizo referencia a la necesidad de potenciar la alfabetización en su país. "Las democracias tardan más en tomar decisiones, pero generan un desarrollo sostenible", afirmó. Sin embargo, Nandan Nilekani se mostró optimista cara al futuro, "dependiendo de las políticas que se lleven a cabo podremos lograr crecimientos del 6 al 10 por ciento. El 60 por ciento de nuestra población está por debajo de los 15 años, se trata de un buen motor de crecimiento. Además, el inglés ha supuesto una ventaja competitiva y la formación superior es excelente. También tenemos un buen desarrollo tecnológico". Por último, lanzó otro guiño a las empresas: "Tenemos un mercado de consumidores inmenso".