Un estudio de Mercer HR Consulting analiza el precio de 200 servicios en 144 grandes ciudadesMadrid y Barcelona bajan posiciones en la lista y ocupan los puestos 53 y 56 respectivamentemadrid. Algunos lo denominan "la nueva Armada Invencible". Porque a las empresas españolas se les empiezan a quitar los complejos, y es cada vez más habitual ver carteles en español en polígonos industriales, rascacielos de oficinas y fábricas de medio mundo. Empresas constructoras, del sector textil y bancos se codean con los grandes de otros países. Tener empleados repartidos por esas sedes sale caro, sobretodo en algunas ciudades. La mayoría de las compañías analiza el coste de vida de los países donde está presente y así paga a sus expatriados. Y hay sorpresas. Porque la retribución que debe recibir el empleado de la sede moscovita es más alta que el de la capital británica. Y su sueldo no sólo incluye la nómina. Muchas empresas añaden el alquiler de vivienda, un seguro médico y hasta la matrícula del colegio de los hijos. Moscú es la ciudad con el coste de vida más alto del mundo, y ha conseguido desbancar a Tokio del primer puesto. La capital japonesa desciende hasta el tercer puesto. Al menos eso se deduce del ranking elaborado por Mercer HR Consulting en 144 grandes ciudades de los cinco continentes. Una lista en la que calcula los precios de más de 200 productos y servicios en cada una de ellas, entre los que destacan la vivienda, la ropa, el transporte, ocio y electrodomésticos. Pocos españoles en RusiaLos últimos datos del Instituto de Comercio Exterior (ICEX) revelan que la presencia española en Rusia es más bien "escasa", y se concentra en el sector agroalimentario y en ciudades como Moscú y San Petersburgo. Campofrío tiene desde hace algún tiempo una planta en ese mercado, y pequeñas empresas como Laminex Granada, la cooperativa de aceitunas Acorsa o la bodega gaditana Grupo Estévez también han puesto una pica en la Plaza Roja. ¿Qué tiene Moscú para salir por encima de la capital nipona y de las cosmopolitas Londres y Nueva York? Que no tiene rivales y que parte de cero, de ahí que la demanda de viviendas para alquiler, oficinas y todo tipo de servicios está aún por explotar. Desde que abrió su economía tras la caída del régimen comunista, "atiende a un mercado demográfico y geográfico enorme, y no tiene ciudades cerca que le hagan competencia", explica Rafael Barrilero, socio de Mercer HR Consulting. Sólo una puede hacer sombra, a juzgar por los resultados del ranking: su vecina San Petersburgo, que ocupa el duodécimo puesto. "Para muchas empresas, ahora es más caro enviar empleados a trabajar a países como Rusia o Corea que a Japón o Suiza, que tradicionalmente han sido percibidos como más caros", añade Barrilero. En el otro extremo de la clasificación se encuentra la capital de Paraguay, Asunción, donde la vida es casi tres veces más barata que en la capital rusa. Entre las diez primeras hay cuatro ciudades asiáticas, (Seúl, Tokio, Hong Kong y Osaka) y seis europeas, ninguna española. Para encontrar a Madrid y Barcelona hay que bajar hasta los puestos 53 y 56 respectivamente. "Los precios de referencia se toman en dólares. Que se devalúe un poco nuestra moneda nos viene bien", argumenta Rafael Barrilero, que ve la botella medio llena y explica que esto puede atraer inversiones de otros países o que multinacionales extranjeras se animen a instalarse en España. Algunas ciudades apuntan maneras y podrían dar sorpresas en próximas ediciones del ranking. "En algunas el crecimiento es constante, como Río de Janeiro, Sao Paulo, las vietnamitas Hanoi y Ho Chi Minh o la propia Beirut", dice Barrilero. Si está pensando en instalar su empresa en alguna de ellas, igual le convendría echar un vistazo a su nivel de vida. Todas las anteriores son más caras que Amsterdam o Toronto.