El uso generalizado de la banda ancha está permitiendo que se hagan compras online con una facilidad inusitada, sin cortes de conexión, con rapidez y absoluta comodidad. Sin embargo, hay que estar prevenidos porque los diferentes virus que pululan por la Red pueden convertir la experiencia del comercio electrónico en una auténtica pesadilla. Luis Corrons, director técnico de PandaLabs, explica que "en Navidad, el número de transacciones online aumenta considerablemente, por eso, los ciberdelincuentes incrementan también el número de sus creaciones a fin de hacerse con el dinero de los usuarios". Una de las más letales se presenta en forma de troyanos. Estos códigos maliciosos están diseñados para robar contraseñas de acceso a banca online, a sistemas de pago como por ejemplo el PayPal, creado por eBay, para transacciones online. Supusieron casi el 20 por ciento del malware aparecido este año y, en concreto, el de tipo bancario, es protagonista de uno de cada cuatro ataques. El funcionamiento de este virus es muy variado, desde capturar las pulsaciones del teclado hasta redireccionar al usuario a la página falsa de una entidad bancaria. Ante esta amenaza, los compradores deben estar seguros de que su ordenador se encuentra libre de códigos maliciosos antes de realizar cualquier transacción online.Un segundo riesgo al que se enfrentan los consumidores estas Navidades es al phishing. Se trata de correos que simulan el proceder de una entidad bancaria o servicio de compra online, pero que resultan ser falsos. Generalmente, se pide al usuario que pinche sobre un enlace y proporcione sus claves bancarias. Si el usuario lo hace, estará dando esas claves a los ciberdelin- cuentes. Mensajería instantáneaFinalmente, otra de las herramientas que será empleada masivamente por los usuarios estas Navidades será la mensajería instantánea. Quién no se verá tentado, por ejemplo, de enviar un feliz año masivo la noche del 31. Sabedores de ellos, los ciberdelincuentes hace ya unos meses que apostaron por estos servicios como medio para distribuir sus creaciones. Generalmente, este tipo de virus se propaga enviando enlaces o archivos que parecen provenir de uno de nuestros contactos. Sin embargo, si uno de ellos pincha sobre el mismo o ejecuta el archivo, quedará también infectado. Corrons recomienda por tanto no hacer ninguna de esas dos operaciones sin estar antes seguro por completo de quién se lo envía.