Directivos de varios fabricantes y distribuidores analizan las fórmulas para seguir creciendoCrear vínculos emocionales y fidelización son algunas de las claves del sector del gran consumomadrid. Lo que antes era uno de los momentos de ocio más importantes los fines de semana se ha convertido en una tarea con la que hay que cumplir por obligación, porque de alguna forma hay que llenar la nevera y la despensa. Hacer la compra ya no es lo que era, y eso lo saben muy bien tanto fabricantes como distribuidores. Algunos de los más importantes en el mercado español se reunieron ayer en la jornada Tecnomarketing 2007, para hablar sobre las fórmulas de crecimiento en el sector. Y como no podía ser de otra manera, alguien pronunció la palabra mágica: innovación. Pero quizá no de la forma a la que estamos acostumbrados. "No se trata sólo de introducir novedades en el producto en sí o sacar al mes un montón de nuevas referencias, sino de crear nuevas fórmulas de compra, nuevos vínculos emocionales. Porque cada vez se está estudiando más cuál es la relación del consumidor con los puntos de venta", aclaró Julio Roda, director general de Alimentación del grupo Pepsico. 20.000 nuevos productosNo parece que le hayan hecho mucho caso los actores de esta película, teniendo en cuenta que, sólo el año pasado, las empresas del sector de gran consumo lanzaron al mercado 20.000 nuevos productos, según los datos de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores Aecoc. Enric Ezquerra, director general de Condis Supermercats, suscribió las palabras de Roda: "Es mucho más interesante innovar en el momento del consumo que en el packaging". También Jesús Pérez, director de Operaciones del grupo El Árbol, que puso la nota pragmática de la sesión en cada una de sus intervenciones. Como cuando aseguró que existen determinados tipos de I+D, como el cambio de envoltorio y añadir algún nuevo ingrediente al producto, pero eso sólo consigue una cosa: "Que al final los supermercados sufran un auténtico atropello de referencias cada semana, cuando el requisito de cualquier surtido es que quepa en el lineal. Ni más ni menos". Para ese momento, más de uno de los participantes en la mesa redonda había pronunciado la segunda palabra mágica: consumidor. Ése del que dijo Arancha Cordero, directora de la unidad de negocio de Cuidado Personal y del Hogar de Unilever España: "No quiero que mi producto me lo compre hoy, sino que se haga fiel a él. Porque, obviamente, si ofreces un producto a más bajo precio te lo comprarán pero... ¿ese tipo de crecimiento es sostenible?". También mostró algo de escepticismo con respecto a la innovación. Hacerlo de verdad, dijo, es sumamente complicado, sobre todo cuando los estudios indican que sólo triunfa uno de cada diez lanzamientos en el mercado. "Y sólo hablo de los grandes", dijo. ¿De quién hablamos?Jesús Pérez irrumpió para definir su concepto de consumidor. Ese español medio que en cuestión de 20 minutos "busca en su cartera un cupón para ahorrarse tres céntimos en un yogur, pero no le importa gastarse 8 euros en medio kilo de salmón ahumado para su gato, le da tiempo a regatear con un subsahariano para sacar a buen precio el último atropello de David Bisbal y acaba cenando una ración de gambas a la plancha". "¿Me podéis explicar cómo le damos respuesta?", preguntó a sus colegas de mesa. Saberlo todo de él. Ésa es la cuestión. Una inversión de lo más rentable para las empresas con tal de acertar con sus necesidades. De lo importante que es se encargó de hablar Ignacio González, director comercial de Carrefour: "Nuestra base de datos contiene información sobre siete millones de hogares, de los cuales hay más que tienen mascota que niños pequeños. Y hay unas 16.000 personas que todas las semanas hacen la compra, y en todas esas visitas compran un libro. ¿Saben lo importante que es esto para una editorial?".