madrid. El Consejo de Ministros aprobó ayer dos reales decretos que trasponen al ordenamiento jurídico español la normativa comunitaria y confieren una mayor responsabilidad a los productores para la puesta en el mercado de alimentos más seguros, según el Ministerio de Sanidad y Consumo. La primera de las disposiciones de trasposición deroga los reales decretos que establecen las condiciones sanitarias de producción y comercialización de productos de origen animal, condiciones que ahora se recogen en los reglamentos de higiene. En ella se regulan también determinadas actividades que quedaban fuera del ámbito de aplicación de los reglamentos, como las referidas al suministro directo por parte del productor de pequeñas cantidades de productos primarios al consumidor final o a establecimientos locales de venta al por menor, informa Servimedia.El segundo de los reales decretos suprime el Anexo II del Real Decreto 2551/1994, sobre condiciones específicas de salud pública que deben cumplir una serie de productos de origen animal destinados al consumo humano sin normativa específica, como la miel, las gelatinas, las ancas de rana o los caracoles.Las exigencias reguladas en dicho Anexo se sustituyen por los requisitos que están recogidos en los reglamentos comunitarios aprobados en 2004, sobre higiene de los productos alimenticios.