madrid. Apuestas, riesgos, faroles, ases en la manga, cambios de estrategia... Estamos hablando del mundo del póquer, pero perfectamente podría ser el del día a día de cualquier compañía, y quien vive en el mundo de la empresa lo sabe. Pero si hay alguien que entiende -y mucho- de esto es Isaac Mayolas, un joven de 26 años que, escondido tras sus inseparables gafas oscuras, consiguió hacerse el año pasado con el título mundial de póquer mano a mano. La próxima cita es en mayo, en el Casino de Barcelona, su ciudad natal. De naipes, tácticas y otras artes habló Mayolas con elEconomista. P Un tapiz de póquer se parece mucho al mundo empresarial, ¿Cómo saber cuándo es el momento de la retirada? R Las grandes retiradas son las que ahorran al buen jugador perder todo su dinero. En ocasiones los jugadores de póquer no nos retiramos a tiempo con la esperanza de que la suerte nos salve de situaciones comprometidas, pero a la larga es un despilfarro de dinero inútil. Uno debe retirarse cuando su mejor análisis objetivo de la situación le dice que tiene más posibilidades de perder que de ganar. En el mundo de la empresa es más complicado, intervienen muchos más factores y sacar conclusiones sería algo arrogante por mi parte. P ¿Cómo darse cuenta de que alguien está yendo de farol? En el mundo de la empresa pasa mucho... R Los cambios repentinos de actitud suelen ser índices claros de un farol. Como en las empresas, cuando alguien te da más explicaciones de lo normal o actúa excesivamente agradable. Este tipo de actitudes suelen ser símbolo de que esa persona está escondiendo algo.P Es especialista en mano a mano, ¿qué es mejor, tener una buena mano derecha que sepa dirigir o tener mucha 'mano izquierda'?R En la vida, más vale buscarse buenas manos derechas en quien se pueda confiar, pero en una partida de póquer se necesita mucha mano izquierda para ganar -bromea- ¿Será que gané el campeonato del mundo porque soy zurdo?P Pasamos a la táctica... ¿Está de acuerdo con la máxima de que la mejor estrategia es un buen ataque? R Depende. Si te atacan deliberadamente, debes tender trampas al contrincante para que no haga más que defenderse. La mejor estrategia es conocer a tus adversarios y combinar un juego conservador con altas dosis de agresividad.P Una de refranes... ¿Con cuál se queda: 'el que no arriesga no gana' o 'la avaricia rompe el saco'? R Me quedo con el que no arriesga no gana. ¿Sabes por qué? El primero tiene una connotación positiva y emprendedora. El segundo suele decirlo el que espera sentado en una silla a que le pase el mundo por delante.P ¿Cuál ha sido su mejor 'escalera de color en la vida?R Eso lo tengo claro, mi familia y mis amigos. Jugar al póquer no implica para nada ser individualista y solitario. Y aunque pueda parecer raro, muchos de mis mejores amigos los he hecho en un tapiz de póquer. Al fin y al cabo, también es un juego de equipo.P Y su mejor 'as en la manga'...R Tomar mis decisiones de la forma más analítica posible: sólo juego contra aquellos rivales o en aquellas competiciones en las que tengo posibilidades reales de vencer. Suena contradictorio ese pensamiento en un juego de apuestas, donde las decisiones parecen tomarse con un cierto azar. El azar existe en el póquer, y el secreto reside en minimizar este factor.P A veces se dice que la vida es un juego, pero para usted ¿dónde empieza el juego y donde termina el trabajo? R Durante un tiempo el juego ha sido mi fuente de financiamiento, llamémoslo trabajo, pero no está concebido para esto. Debe de ser una afición, una manera de divertirse.P ¿Cuál es el secreto para convertirse en campeón del mundo? Al menos, dénos una pista...R Lo primero, la disciplina. Además, como en cualquier otro deporte, desarrollar a fondo cualidades como las matemáticas, la percepción y el análisis lógico es clave. También es muy importante tener una excelente gestión del dinero, y al igual que en la bolsa y en los negocios, jamás arriesgar más de la cuenta.