Equipo de gestión y proyecto de negocio, los aspectos más valorados para lograr financiaciónEn España, sólo el 5 por ciento de las peticiones de inversión acaban materializándosebarcelona. Péinese, arréglese, coloque bien su corbata y llame sin miedo. Las entidades de capital riesgo reciben cada año cientos de peticiones de emprendedores o pequeñas empresas con potencial para que inviertan en ellas y consigan desarrollarse en un tiempo récord. Estas compañías buscan invertir en proyectos que, independientemente de su tamaño, tengan algunos rasgos que indiquen que van a triunfar. Los emprendedores no saben muy bien por dónde empezar pero también creen que aquello que presentan a sus futuros socios del capital riesgo es lo mejor. La mayoría de veces se equivocan. "La selección de proyectos en los que invertir que hace una entidad de capital riesgo es un proceso de embudo", reconoce la profesora de Control y Dirección Financiera de Esade, Luisa Alemany. En realidad, sólo el 5 por ciento de las propuestas que caen en manos de las entidades de capital riesgo consigue el dinero. Hay algunos aspectos que se valoran por encima de otros para decidirse a invertir en uno u otro proyecto. En qué se fijanJuan Díaz-Laviada, presidente de la Asociación Española de Entidades de Capital Riesgo (ASCRI), asegura que son cuatro los aspectos que se deben resaltar para seducir a la entidad de capital riesgo. "Un buen equipo directivo, un business plan elaborado y entre cuatro y cinco años vista, que la compañía tenga un modelo probado de empresa y de funcionamiento y, por último, que la que solicita el capital tenga un cierto tamaño. Estas son las cosas que hay que cuidar".El presidente de ASCRI añade además otros matices secundarios pero también importantes, en especial para las empresas de capital semilla. "Las empresas que no ganan dinero son menos atractivas", apunta Díaz-Laviada. Por eso recomienda acudir a una entidad de capital riesgo cuando ya "se tiene algún beneficio. Hay que tener presente que entre las compañías que no ganan dinero, hay más mortandad ". Según aseguran en ASCRI, las operaciones de los últimos años tienden a ser "grandes operaciones y con un gran volumen de capital invertido". Ser pequeña e ir a una entidad de capital riesgo no es tan malo, también tiene cosas buenas. "Aunque es más difícil que te hagan caso, la inversión es menos complicada que en operaciones más grandes", apunta Díaz-Laviada.Ideas de negocioLas pequeñas empresas y las ideas de negocio que necesitan inversión deben remarcar en el plan de negocio "el equipo gestor, luego el tamaño del mercado y finalmente lo que hace único a ese proyecto, como por ejemplo la tecnología o las barreras de entrada", explica José Martí Perelló, profesor de la Universidad Autónoma de Madrid y autor del Informe de Impacto del Capital Riesgo en la economía española. Normalmente y según comentan los expertos, cada uno de los socios que forman parte de las entidades de capital de riesgo no atienden más de cinco proyectos al mismo tiempo y la media de permanencia en cada uno de ellos está entre tres y cinco años. Perelló apunta que el proceso completo "no duraría menos de seis semanas. Lo normal es que entre los primeros contactos y el desembolso pasen entre tres y cuatro meses". Para iniciar este proceso, Alemany recomienda informarse "incluso por Internet" (www.ascri.org) de las entidades que mejores posibilidades ofrecen al proyecto. No es bueno, según explica Alemany, enviar a todas las entidades el plan, porque "sólo un 25 por ciento llegan hasta la primera reunión". El pasado año el capital riesgo invirtió más de 2.700 millones de euros en España. Un 44 por ciento fue para empresas semilla y con menos de tres años de vida. Se espera que en 2007 la cifra destinada a esta tipología de compañías crezca, ¿por qué no intentarlo?