No hay ninguna norma que obligue al tallaje unificado, ni en España ni en la Unión Europeamadrid. "Proporcionar una imagen física saludable y ajustada a la realidad de la población española", es el objetivo que ha llevado al Ministerio de Sanidad a emprender el estudio que medirá a una muestra representativa de 8.500 mujeres de edades entre los 12 y los 70 años para establecer tallajes estándar. Costará un millón de euros y sus resultados los asumirán los firmantes, "el 80 por ciento del sector fabricante y distribuidor", según la ministra Elena Salgado.Su departamento reconoce que "no hay ninguna normativa que obligue a esta unificación, ni en la Unión Europea ni en España", y que por este motivo, "las medidas no siempre coinciden, lo que puede ocasionar errores a los consumidores a la hora de adquirir prendas de vestir". Además, se pretende que al consumidor llegue una información adicional en la etiqueta, como las medidas corporales que correspondan a cada talla. En definitiva, "que belleza y salud vayan de la mano", dijo Salgado.En el trasfondo del asunto se encuentran los trastornos alimenticios que ocasionan enfermedades como la anorexia y la bulimia. Aunque "de la talla del pantalón no sólo dependen estas patologías", dicen desde la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición.El propio sector fabricante es escéptico. "No creemos que la moda y sus tallas sean un problema directamente relacionado con los trastornos alimenticios y que con esta iniciativa se vaya a solucionar", declara Sara Pérez, de la asociación que reúne al sector del género de punto. Algo en lo que está de acuerdo Ángel Asensio, de Fedecon: "Moda y anorexia no son causa-consecuencia".En cualquier caso, los técnicos del Instituto Nacional de Consumo iniciarán los trabajos en breve para tener los resultados del estudio, según estiman, a principios del año que viene.