Se ponen de moda en Estados Unidos las vacaciones para quedarse 'embarazados' La franquicia Odre y Hogaza abre su cuarto local en Madrid, con más de 16 en Españamadrid. "En los negocios, lo moderno pasa de moda pero lo rústico siempre permanece". Esta frase de Francisco José de Toro, director de Expansión de la franquicia Odre y Hogaza, resume el espíritu de su negocio: un bar de tapas de ambientación medieval, donde los alimentos se elaboran a fuego lento, cocidos en las brasas del horno de leña.Francisco José explica que la idea se le ocurrió hace cuatro años. cuando se dio cuenta de que las tradicionales cadenas de tapas no se diferenciaban mucho unas de otras. "Si se copia de los demás, al final no hay innovación". Y, en su caso, la novedad residió en una elaboración artesanal de platos, cocidos con carbón y en un horno de leña.La decoración vino después. ¿Por qué los motivos medievales? El motivo es demostrar que su local no se dirige a exquisitos paladares, sino al público en general. También contribuyó que Francisco José y su hermano tuvieran experiencia en el mundo de la construcción, lo que les dio la idea de utilizar paredes hechas con gruesos muros de piedra y vigas de madera como parte intrínseca del local.Hace unos días inauguraron su cuarta franquicia en Madrid. En total tienen 12 abiertos y otros cuatro en obras, cuya inauguración se celebrará antes de final de año. Aparte de Madrid, tienen locales en Jaén, Albacete, Alicante, Valencia, Vizcaya, La Coruña, Vizcaya, Badajoz y Córdoba.Los interesados en el negocio deben darse prisa, pues el promotor del negocio advierte de que los requisitos se endurecerán a principios de año. De momento, el canon de entrada es de 15.000 euros; más un cuatro por ciento de facturación en concepto de royaltie, y otro dos por ciento por el canon de publicidad.