barcelona. Pagarán 6.000 euros por una reproducción exacta de uno de los barcos que Hergè inventó para su personaje de cómic Tintín. Son un grupo de aficionados que después de contactar con la viuda de Hergé, han conseguido los planos originales que el autor dibujó para este barco y ahora, en Barcelona, un maquetista reproducirá este velero que venderá a 6.000 euros la unidad. Ésta es la nueva cara de las aficiones en España. Si hace unas décadas las carreras de coches teledirigidos reunían a varios familiares, ahora se han convertido en auténticos campeonatos estatales en los que compiten tanto los participantes como las mejores máquinas. Maquetismo, miniaturas, slots, automóviles de radiocontrol, aeromodelismo, casas de muñecas, dioramas, coleccionismo, manualidades, joyería con minerales, punto de cruz e incluso patchwork, son algunos de los nuevos hobbies que se practican en España. En la última década, estas actividades han pasado de domingueras a recibir una media de tres horas semanales de dedicación y una media de cinco euros de mantenimiento al mes por cada aficionado. Desde hoy, y hasta el domingo, Barcelona acoge el undécimo Salón del Hobby, por el que pasarán más de 53.000 personas. En sólo tres días, los organizadores calculan que se generan unos 650.000 euros de negocio. Sin embargo los expositores afirman que el mercado inducido con el Salón supera los cinco millones de euros.Ha cambiado el tipo de aficiones en los últimos años pero también ha cambiado el tipo de aficionados. Las mujeres han pasado a convertirse en parte importante del mercado del tiempo libre, superando en algunas actividades al sexo contrario. "Ellas ya representan el 90 por ciento en algunas aficiones como el patchwork o el punto de cruz. En otros sectores como el de los slots van aumentando su presencia, sobre todo entre los menores de edad", asegura Jordi Lluch, presidente de Event Consulting, empresa organizadora del Salón. Entretenimiento y negocioLas aficiones se han convertido en un suculento negocio para todos, desde la primera hasta la última pieza que participa en el montaje. Minoristas, fabricantes, importadores, distribuidores y los mismos aficionados pasan horas pendientes de las últimas novedades y son estas mismas horas que emplean en ello, las que revalorizan los objetos de sus aficiones; desde un mueble de una casa de muñecas hasta un coche de época en miniatura. Todo vale para pasar el rato y, cuando se canse de divertirse, para venderlo. Los hobbies ganan valor conforme más años tienen. Así un sello de un coleccionista puede hasta triplicar su valor en cuestión de meses según diversos factores como: el precio que marcan otros coleccionistas, el número de timbres similares que existan en el mercado o la llegada de alguna nueva colección. La revalorización de estas joyas también aumenta según la épocas del año: la Navidad es una de ellas. Los precios de piezas de coches, de modelos de aeromodelismo o simples colores para pintar lienzos pueden aumentar hasta un 20 por ciento. Por no hablar del incremento de las ventas que roza el 60 por ciento. Algo tan catastrófico como una guerra también sirve para hacer negocio, y no el del petróleo. Durante la guerra de Irak fueron miles los estadounidenses que sacaron a la venta aquellos pequeños recuerdos que coleccionaban de algún viaje a Oriente Medio o de la anterior Guerra del Golfo. El sitio web Ebay recibió más de 1.000 visitas al día de coleccionistas que ofrecían dinero iraquí, camisetas y vídeos para aprovechar la notoriedad que Sadam Hussein alcanzó a partir del 20 de marzo de 2003. En tan sólo tres semanas, un dinar iraquí con la cara del dictador grabada llegó a subastarse por 2.000 dólares y una fotografía firmada por Hussein por 203 dólares. Cuánto vale ser aficionadoUn coche de gama media para correr en slots puede costar entre 500 y 600 euros, casi como un avión de aeromodelismo. Si lo quiere para competir prepare de 800 euros en adelante. Aunque los hay de más de 4.000 euros. "La inversión inicial es mínima y no hay nadie cuya economía le impida iniciarse en algún hobby", indica Lluch. A partir de 10 euros, aseguran en la organización, pueden empezar con un hobby, aunque algunos como las casas de muñecas requieran inversiones de hasta 20.000 euros. La Asociación Española de Fabricantes de Juguetes cifra en 1.100 millones de euros el negocio anual en España y el fabricante de coches de slot Ninco cree que el mercado mundial de este sector dentro de las aficiones mueve entre 30 y 35 millones de euros anuales. España sólo rivaliza con Alemania y Gran Bretaña.A la vista de estas cifras, Lluch no oculta que "algunas personas" utilizan los hobbies como una manera de ganar dinero, "es verdad que existen profesionales que tiene aficiones como quien tiene un negocio". La revalorización de las aficiones, mínimo de un 10 por ciento anual, genera beneficios "sin trabajar". Uno de los coches de época en miniatura creado en exclusiva para conmemorar la primera edición del Salón del Hobby (1.995) vale diez veces más ahora que entonces y los coleccionistas llegan a pagar más de 300 euros por uno de ellos. También ayuda bastante a su revalorización que sean "series limitadas", a menos existencias, más valor.