Durante los meses de verano, son muchos los españoles que deciden tomarse unos días de descanso. No obstante, aunque existen múltiples beneficios para disfrutar del ocio y tiempo libre, un 57 por ciento de ellos no desconecta del trabajo durante las vacaciones, según el informe What Workers Want 2019 de Hays. El motivo: sienten la necesidad de estar pendientes del móvil, la tableta o los correos electrónicos.Asimismo, la línea entre la vida laboral y la personal se está diluyendo. Como constata Hays en otro de sus estudios, la Guía del Mercado Laboral 2019, el 80 por ciento de los españoles hace horas extras durante el año y el 60 por ciento de ellos afirma que no son remuneradas ni las recupera.Generaciones adictasSegún Hays existen cuatro motivos que reflejan la poca desconexión de los trabajadores durante el verano: la tecnología, que permite trabajar desde cualquier lugar del mundo; el miedo a ser reemplazado, una preocupación al alza entre los trabajadores; la percepción de que estar ocupado es visto como algo positivo; y la mentalidad impuesta de los jóvenes por encontrar un propósito en su trabajo, que puede conllevar a una presión innecesaria sobre ellos.Por este motivo, el 60 por ciento de los millennials y post-millennials confiesan estar pendientes del móvil durante las vacaciones, mientras que el 27 por ciento de los Baby Boom (los nacidos entre 1940 y 1959) entra a su correo. Otros aspectos interesantes que influyen en la poca desconexión de las plantillas son el tipo de organización y el tamaño de la misma. Así, el 66 por ciento de los trabajadores de las grandes empresas siente la necesidad de conectarse durante su tiempo libre, mientras que en las pymes es del 60 por ciento. El salario también condiciona la necesidad de trabajar fuera de horas, ya que, según los informes de Hays, cuanto más elevado es el sueldo y las responsabilidades, más adictos e hiperconectados se sienten los profesionales.Disminuye la productividadDe esta forma, los expertos recomiendan la desconexión total en vacaciones, para un mejor descanso físico, la reducción de los niveles de estrés y el desarrollo de nuevas ideas. Es decir, para fortalecerse, cuidarse y reiniciarse mentalmente. Para los expertos de Hays "hay una fina línea entre trabajar duro y trabajar de manera obsesiva dañando la productividad y, lo que es peor, la salud mental y las relaciones personales".Y es que, "los trabajadores rinden más si pueden descansar y desconectar unos días", apunta Gina Aran, experta en empresas saludables y cultura de empresa, en un informe de la UOC. "El hecho de que los empleados sientan bienestar previene enfermedades psicológicas o del sistema nervioso, así como dolencias osteomusculares, daños en la vista o problemas de obesidad", añade Gina Aran.