Fútbol

La venganza de Cristiano Ronaldo por la advertencia de Florentino Pérez

    Cristiano Ronaldo habla al oído con Laurent Blanc. <i>Imagen</i>: EFE

    EcoDiario.es

    Florentino Pérez recibió el pasado martes a Cristiano Ronaldo antes del duelo ante el PSG pidiéndole explicaciones por unas recientes declaraciones en la revista Kicker en las que dejaba la puerta abierta a su salida. "¿Qué has dicho?" cuestionó el mandatario a un sorprendido CR7. "Yo no he dicho eso. Lo he dicho igual, pero diferente", trató de explicarse de forma apresurada, sin tiempo apenas para explayarse y con las cámaras de televisión registrando el momento. Al futbolista no le gustó el gesto del presidente. No le gustó esa estrategia pública para marcar territorio frente a un Cristiano que, además, hizo esas declaraciones en agosto, aunque en verdad se publicaron a principios de esta semana con motivo de la premier de su película-documental. Es por ello que, con más calma, la estrella merengue meditó su venganza y la cumplió ese mismo día, en ese mismo escenario y con los argumentos que más enfadan a Florentino Pérez, los que hablan de una posible marcha del Santiago Bernabéu.

    Cuenta hoy el diario Marca que Cristiano Ronaldo quiso hacerse poseedor de la última carcajada y hacer valer el refrán de 'quién ríe el último, ríe mejor' en todo este asunto. Su mecanismo de 'vendetta' fue relativamente sencillo.

    Después de un partido en el que no pisó área (eso, se entiende, no fue parte del plan), el delantero se dirigió a Laurent Blanc y charló con él a pie de campo, a la vista de todos y tapándose la boca, como queriendo manifestar que lo que le estaba diciendo era alto secreto. Los flashes se dispararon y los rumores, también.

    En París dan por seguro que algo sobre su futuro le dijo. En Madrid miran el guiño con recelo. Quizá Cristiano sólo bromeó con el revuelo que se armaría con la foto de ambos juntos en esa actitud divertida. Puede que fuera un comentario de ese tipo el que provocó la carcajada del entrenador francés al terminar la charla.

    En todo caso, Cristiano sabía perfectamente que con esa instantánea provocaría un ataque de celos en Florentino Pérez. Pero aún hubo tiempo para más.

    Unos 40 minutos después de que finalizara el choque, Cristiano abandonó el Bernabéu por la zona mixta, tal y como obliga la UEFA. Allí se dejó caer Nasser Al Khelaifi, presidente del PSG y mano derecha de Al-Thani, multimillonario dueño del club. Mientras Al Khelaifi respondía a los medios, Cristiano pasó por su espalda y se paró para saludarlo de forma afectuosa, con todos las cámaras registrando el momento. ¿Un gesto de mera educación? Puede que sea solo eso, pero lo cierto es que en Madrid entienden que no, que hubo algo de mensaje. Que Cristiano pudo haber esperado a que el mandatario abandonase la zona o haber pasado de largo, sin más. Pero no. Cristiano se paró y facilitó, de nuevo, una imagen para alimentar suspicacias.

    Fue así como terminó su noche en el Bernabéu. Velada que arrancó con Florentino Pérez dejándolo en fuera de juego. Luego CR7 logró su 'venganza' y dejó claro que él también sabe dominar la escena pública, aunque este 'combate' de carcajadas aún no ha terminado. Veremos si es él quien logra reír el último o si es el mandatario el que se queda con la sonrisa definitiva.