Fútbol
El preocupante silencio de Luis Enrique
La derrota del pasado sábado ante el Málaga ha reabierto viejas heridas en el Barça. "¿Pero qué hace? ¿Ahora a qué jugamos?", se preguntaron muchos jugadores culés mientras veía como su técnico, Luis Enrique, hacía cambios que para muchos de esos futbolistas eran inexplicables. Esa sensación tensa se prolongó tras el encuentro y en el entrenamiento de ayer domingo. Luis Enrique no habló más a la plantilla tras la derrota. Un silencio que preocupa a miembros del equipo blaugrana y que no ha hecho sino convertir el ambiente del equipo en un panorama tenso que no se respiraba desde que los barcelonistas cayeron ante la Real Sociedad en Anoeta.
Ese silencio es hoy noticia en todos los medios deportivos catalanes y también en los madrileños. Los jugadores culés se han encargado de airear esta nueva y desconcertante situación.
Porque es la primera vez que Luis Enrique reacciona de este modo. Es decir, que tras la derrota en San Sebastián, Lucho trató de tomar las riendas de la situación y lo hizo, además de forma enérgica.
Sucedió el 5 de enero, cuando en el entrenamiento a puerta abierta propuesto para ese lunes, Messi se ausentó de la sesión por una supuesta gastroenteritis que hizo que el técnico montara en cólera y quisiera expedientar a 'La Pulga'.
Antes, el técnico advirtió a los suyos de los riesgos de salir al campo sin actitud y les culpó de buena parte de los errores cometidos en Anoeta, algo que no gustó mucho a un equipo que pensaba que las rotaciones en el once algo habían tenido que ver. Con todo y con eso, al menos en aquella situación hubo bronca. Este fin de semana, ni eso.
Luis Enrique, acabado el partido contra el Málaga, no dijo nada. Los jugadores entendieron que el asturiano reflexionaría y se guardaría su discurso para el día siguiente, esto es, para el entreno de ayer. Pero no fue así.
También se repitió el silencio y con él, la percepción de que el entrenador quiere que sean los propios jugadores los que asuman sus errores y piensen por sí mismos qué sucedió para perder ante el Málaga.
Con todo y con eso, muchos jugadores creen que debería ser ahora cuando Luis Enrique debería asumir un liderazgo solidario con el resto del grupo y así encauzar la situación antes de un duelo clave (ante el Manchester City) en el que muchos jugadores se encomiendan más a Leo Messi y su recuperación anímica antes que en las técnicas de motivación de su entrenador.