Xabi Alonso se convierte en el gran problema de Ancelotti tras la Supercopa

Si algo quedó claro ayer en Cardiff, fue la aplastante superioridad del Real Madrid durante todo el partido de Supercopa de Europa frente al Sevilla. Los blancos dominaron en todas las facetas del juego y en todas las líneras del campo, pese a las dudas que ofrecía en la más importante de ellas: el centro del campo.

Carlo Ancelotti arriesgó y decidió apostar en la zona donde se manejan los partidos por tres hombres, dos de los cuales fueron Toni Kroos y james Rodríguez, dos recién llegados al equipo se podría decir. A ellos se unió un experimentado y reconvertido Modric.

La apuesta le salió bien al italiano, que respiró con alivio al ver el funcionamiento de este centro del campo toda vez que dejó fuera a Di María, hombre imprescindible para él que el Madrid sigue queriendo vender y Khedira, otro nombres que suena para abandonar el club, si bien no tan vital para los planes de Ancelotti como el argentino.

Pero, sumado a todos estos, hubo ayer un nombre que planeó por la mente de muchos: Xabi Alonso. El tolosarra no pudo ser de la partida por la sanción que le impuso la UEFA al saltar al campo desde el palco en la pasada final de Champions en Lisboa. Sin embargo, a muchos les quedó la duda de si Ancelotti hubiese apostado por él en detrimento de alguno de los tres que finalmente jugaron

Jugador experimentado y con clase, veterano del vestuario, querido por la afición y respetado por el cuerpo técnico, Xabi Alonso ha sido durante las últimas temporadas el alma del equipo en la zona de construcción. El propio Ancelotti pidió encarecidamente su renovación ante el miedo de que sin el '14' el equipo no combustionara.

No obstante, ahora todo puede cambiar de golpe para un Alonso al que los fichajes que ha hecho el Madrid le pueden adelantar en la titularidad esta temporada. Con 32 años, que serán 33 este otoño, el centrocampista ve cómo Kroos, James, Isco o, en caso de quedarse en Chamartín, Di María o el propio Khedira, todos más jóvenes que él, le pueden relegar a una suplencia que, si bien le vendría bien para dosificarse y estar listo para las grandes citas, haría descender su influencia en el juego.

El club, que no es ajeno a esta situación, ya ha dejado abierta la puerta para que el tolosarra salga del equipo siempre que llegue una oferta interesante económicamente y que sea del agrado del jugador, siempre teniendo en cuenta que Alonso es un jugador que, pese a la edad, sigue siendo cotizado en el mercado.

Así las cosas, y dejando a un lado el debate de la portería que tanto preocupa al italiano, Ancelotti tiene otro importante reto esta temporada: tener contenta a toda la amplia nómina de centrocampistas de calidad que tiene el equipo, especialmente con un Xabi Alonso que no querrá verse relegado al banquillo.