Fútbol

La llegada de Kroos pone en peligro a los dos bendecidos de Ancelotti

    Modric y Di María, en peligro por Kroos.


    Ya es oficial. Toni Kroos será jugador del Real Madrid durante las siguientes seis temporadas. Con la llegada del reciente campeón del mundo, el equipo blanco adquiere a uno de los mejores centrocampistas del momento y de mayor proyección. Un futbolista aún sin techo que, sin embargo, mete a Carlo Ancelotti en un brete.

    Todo sea dicho, en un envidiable problema, uno de esos que a cualquier técnico le gustaría tener. A priori, Kroos llega para ser titular indiscutible. Su trayectoria en el Bayern y en el Mundial, además del interés blanco, avalan esta hipótesis. Y para introducir al teutón hay que quitar una pieza. Aquí empieza el dilema para 'Carletto'.

    Estableciendo como base el 4-3-3 del italiano de la pasada temporada sin Khedira (es decir, con Xabi Alonso, Luka Modric y Ángel Di María), hay dos jugadores fetiches del entrenador que tienen todas las papeletas para engrosar las filas del banquillo.

    Kroos no llega para sustituir a Xabi Alonso, el que tendría la posición más retrasada de los tres medios. Kroos no es un pivote al uso, abarca una mayor zona del campo y tiene cualidades de sobra para surtir de asistencias al tridente de ataque. De hecho, Kroos ha jugado de mediapunta frente a los blancos en el partido de ida de las semifinales de Champions en el Bernabéu, con Lahm y Schweinsteiger detrás. Por eso, croata y argentino son los candidatos para abandonar el centro del campo.

    Para ello, Ancelotti tendrá que renunciar a una parte de su esencia en el Real Madrid. Di María y Modric son productos propios. Dos casos de dos futbolistas creados a imagen y semejanza de las intenciones del técnico. Del croata hizo el jugador importante en la medular que tanto se echó en falta con Mourinho; de Di María hizo un nuevo jugador, con un cambio al centro del campo que ha convertido al argentino en indispensable.

    Independientemente de si Di María acaba en otro equipo (parece que podría ser así), Kroos llega para sentar a uno de los bendecidos por el míster. La venta del argentino sería una consecuencia directa: además de no sentirse valorado, no admite quedar relegado a la suplencia y significaría un cambio de cromos con Modric como pieza salvada. En caso contrario (es decir, si Di María continuase en el Real Madrid tal y como Ancelotti está intentando por activa y por pasiva), Luka Modric es el que apunta con más insistencia al banquillo.

    Dos alternativas, sin tener en cuenta rotaciones, a las que Ancelotti se resignará obligado por las circunstancias. Kroos es un recurso de tal calibre que no puede ser desdeñado. Uno de los futbolistas más en forma del panorama mundial toca a las puertas de la titularidad y Ancelotti no puede hacer caso omiso. Aunque para ello tenga que prescindir de uno de sus dos máximos logros en el banquillo del Real Madrid.