Fútbol

Cuando el Barça rechazó fichar a los tres mejores centrales del mundo

    David Luiz celebra su gol ante Colombia | Reuters


    El FC Barcelona tiene una misión, por ahora, frustrada. Los culés siguen tratando de cerrar la incorporación de un central que supla las ausencias que, paulatinamente, se han ido produciendo en el centro de la defensa blaugrana. Tras varios meses de especulaciones, ninguno de los candidatos al puesto ha acabado en el Camp Nou. Es más, los nombres que han ido apareciendo se han disipado poco a poco. El asunto se complica.

    Una trabajosa tarea que, en verdad, arrancó hace dos años, cuando las marchas de Puyol y Abidal se daban por cantadas. En aquellos días, el Barça manejaba tres nombres por encima del resto. Thiago Silva, Hummels y David Luiz, eran, por este orden, los favoritos de Andoni Zubizarreta y sus entrenadores.

    Sin embargo, el Barça despreció sus incorporaciones por entenderlas demasiado costosas o demasiado arreisgadas. Hoy, tiempo después, la terna de zagueros se ha convertido en el mejor trío de defensores del Mundial y, probablemente, en los tres fracasos más sonados de la dirección deportiva barcelonista de los últimos tiempos.

    Thiago Silva, el primero

    El primero de estos fiascos fue, además, reiterado. En verano de 2011, todavía con Guardiola al frente del equipo , Thiago Silva jugaba en el Milan. Su deseo era jugar en el Camp Nou y ser entrenado por el de Santpedor.

    Así lo manifestó en un par de entrevistas en medios locales de su Brasil natal. Los rossoneri pusieron entonces precio a su fichaje: 40 millones de euros. Una cifra que parecía exagerada para un buen defensor que aún no había explotado en el Calcio ni en competiciones europeas o internacionales.

    El Barça trató de hacerse con el jugador por un precio mucho más económico, cercano a los 20-24 millones. El Milan despreció la oferta. Thiago se quedó en San Siro y al año siguiente se repitió la escena: el Barça llamó a su puerta con la excepción de que esta vez tuvo competencia.

    El PSG también quería al central y ofreció no sólo los 40 millones que pedía el Milan, sino que dio al futbolista un sueldo que en Barcelona jamás se llegó si quiera a plantear. Primer comodín perdido. Tocaba buscar más centrales.

    La opción de Hummels

    El siguiente en la lista era Hummels. Potente en el juego aéreo, el zaguero alemán comenzó a despuntar en la temporada 2011-2012. Fue entonces cuando el Barça se puso en contacto con su padre y representante para cerrar un posible acuerdo. El futbolista parecía receptivo a acabar en el Camp Nou. Quedaba negociar con el Borussia Dormtund.

    Los de la cuenca del Ruhr, siempre reticentes a vender a sus estrellas, estaban dispuestos a escuchar ofertas, pero por encima de los 30 millones de euros, algo que al Barça no le gustó demasiado. Con la opción de Thiago Silva abierta, descartaron su fichaje y Hummels acabó quedándose en Alemania. Meses más tarde, ya con el conjunto de Klopp lanzado en competiciones europeas, el Barça lo intentó de nuevo, pero esta vez la postura del Borussia Dortmund fue rotunda: Hummels no se vende.

    El club sabía que Götze se marcharía y que el siguiente sería Lewandowski, aunque tuviera que esperar un curso a acabar en el Borussia Dortmund. Si Hummels se hubiera marchado también, la pérdida de calidad hubiera lastrado al cuadro germano. Klopp convenció a Hummels y el jugador decidió apartar cualquier conversación con el Barça. Segunda bala gastada.

    David Luiz y el "no" del Tata

    La tercera es la más reciente. Se remonta al último verano, cuando David Luiz centró los deseos blaugranas para esta posición. En un primer momento parecía que el acuerdo se podía cerrar por 25 millones de euros, pero Mourinho se negó a que el brasileño saliera. No al menos tan barato.

    El Chelsea aumentó sus pretensiones económicas y colocó el listón en 40 millones. Ante la premura y la necesidad de encontrar un central, el Barça llegó a plantearse aceptar el trato. Fue entonces cuando el Tata Martino fichó por los culés e impulsó la opción de que Puyol fuera su alternativa, amén de frenar el fichaje de Luiz. 

    Pese a los problemas físicos del jugador, Zubizarreta y el resto de la dirección deportiva aceptó la propuesta del argentino. Un año después, Puyol se ha retirado y David Luiz triunfa en Brasil poco tiempo después de haber cerrado su traspaso al PSG por una cifra similar a la que pedía el Chelsea un año antes.