Fútbol
La ambición de Cristiano Ronaldo amenaza al Real Madrid
A Cristiano Ronaldo le quedan dos títulos por conquistar este año con el Real Madrid. Uno, es colectivo. Se llama Champions League y es, para los blancos, una obsesión. Pero no sólo de la Décima vive el crack luso. El otro trofeo que quiere CR7 es un título personal. Se trata de la Bota de Oro a mejor delantero de Europa.
Un premio que ansía y que le podría llevar a dar un peligroso paso en la última jornada de Liga frente al Espanyol. Y es que, a día de hoy, Cristiano está empatado con Luis Suárez (pretendido por los blancos) en la lucha por este trofeo. Ambos suman 31 goles, pero al madridista le queda todavía un partido más para ver puerta y quedarse este galardón en solitario.
El problema es que a día de hoy, Cristiano Ronaldo es duda para el choque frente al Espanyol. Los problemas musculares que arrastra el luso siguen torturándole hasta el punto de que ayer, frente al Celta de Vigo, no estuvo ni en la convocatoria.
El plan inicial del Real Madrid y de Carlo Ancelotti era que su jugador estuviese en la cita del próximo sábado frente a los 'pericos', pero no desde el inicio, sino en la segunda parte. Es decir, que saliera desde el banquillo para probarse y ponerse a punto antes de la cita de Lisboa contra el Atlético de Madrid.
Ahora bien, con la Bota de Oro en juego, lo normal es que Cristiano intente ir un paso más allá y jugar desde el comienzo para ver puerta, asegurarse el galardón y retirarse del partido.
El problema es que esta situación puede suponer un riesgo de lesión que le apartaría del gran partido del año (y de los últimos 12 años) para el Real Madrid. El dilema es considerable, aunque la ambición de Cristiano (otros le llamaría en egoísmo) apunta a que el portugués arriesgará con tal de llevarse un galardón soñado.