Los siete pecados de Muñiz Fernández durante el Elche - Real Madrid
César Muñiz Fernández se convirtió en el protagonista total y absoluto del Elche - Real Madrid disputado este miércoles en el Martínez Valero. Lo hizo tras pitar un penalti inexistente a favor de los blancos en el minuto 94 de partido. Pena máxima que dio la victoria a los visitantes cuando lo más lógico y justo habría sido el empate.
Su polémica decisión a favor del grande fue el error más grave de un partido marcado por decisiones inadecuadas y erróneas, en la mayoría de los casos, a favor del equipo de Carlo Ancelotti.
Desde tarjetas que se marcharon al limbo hasta un tiempo añadido que se alargó más de lo debido, casi todo lo que salió del silbato del colegiado acabó ayudando al equipo merengue. De ahí la indignación de un Elche que, con todo, fue comedido. Los hombres de Fran Escribá sólo hablaron, como mucho, de "robo". Nada más. Nada menos.
Esto fueron los siete errores graves que provocaron el enfado ilicitano. Estos fueron los siete pecados de Muñiz en el Elche - Real Madrid.
1.- Perdona la expulsión a Ramos
En el minuto 33 de partido, Sergio Ramos debió haberse marchado al vestuario por doble cartulina amarilla. En ese minuto el defensa del Real Madrid obstruyó claramente a Rubén Pérez en una flagrante falta con su consecuente amonestación. Sin embargo, Muñiz, consciente de que en el minuto 8 ya había amonestado a Ramos, se la guardó para no provocar la roja al internacional y, quizá, un duelo mucho más complicado desde ese momento.
2.- Perdón a Damián Suárez
Ya en la segunda parte el encuentro se le complicó y de qué manera a un Muñiz Fernandez que también tuvo decisiones que perjudicaron al Real Madrid, aunque, obvio, no en el mismo grado que las decisiones en contra del Elche.
Uno de esos errores en los que benefició al Elche sucedió en cuando Damián Suárez entró de manera brusca a Arbeloa. Debió haber sido cartulina amarilla, pero el jugador ilicitano se fue de rositas. Ya en el minuto 57, el propio Damián Suárez entró en el área del Real Madrid y simuló un penalti que le costó otra tarjeta. De haberse sacado la primera, habría sido expulsado.
Por cierto que en esta acción, la del supuesto penalti a Damián Suárez, sí que es cierto que hubo contacto de la rodilla de Khedira con el futbolista ilicitano, pero fue leve y después de que el zaguero ya estuviera dejándose caer sin todavía haberse producido toque alguno con el alemán. Acertó Muñiz al no pitar pena máxima en esa acción.
3.- La no mano de Khedira
Fue quizá la acción más ridícula de todas, pero la que dejó más a las claras en evidencia el mal arbitraje técnico de Muñiz Fernández. En la segunda mitad, una falta pitada sobre Cristiano Ronaldo fue ejecutada a toda velocidad por el propio portugués, quien trató que la bola tocara en el futbolista del Elche que quería obstaculizar el saque.
La habilidad del rival hizo que el esférico no le tocara. CR7, sin querer, había puesto de nuevo en marcha el juego. Fue ahí donde apareció Khedira para coger el balón con la mano haciendo entender que no Cristiano no había querido sacar. El colegiado debió haber pitado falta y quizá haberle sacado amarilla.
4.- Tiempo añadido
El despropósito de Muñiz comenzó cuando señaló el tiempo de descuento. El colegiado indicó que debían añadirse tres minutos más. El gol del Elche llegó en el 91, y aunque su celebración fue algo prolongada, el reglamento fija que, salvo una pérdida de tiempo flagrante, el festejo de un tanto no debe de ser motivo para añadir más tiempo a un partido. Pues bien, Muñiz no lo entendió así. El córner que provocó el penalti con el que el Real Madrid ganó el duelo se señaló casi en el 94', un minuto después del supuesto final del partido.
5.- El penalti a Pepe
Fue la acción clave. Resulta curioso observar cómo antes de que se saque el balón desde la esquina, Muñiz ya está sólo atento al forcejeo entre Pepe y Carlos Sánchez. Nada más parece distraerle.
Cuando el esférico cruzó el cielo de Elche, Carlos Sánchez forcejeó con Pepe y éste con él. En ese momento el zaguero del Real Madrid se deja caer, cierra el brazo y atrapa el de su marcador para provocar la caída de ambos. Muñiz vio el agarrón a la inversa y señaló un penalti donde no lo hubo. Debio haber sido, como mucho, falta de Pepe. Quizá ni eso.
6.- Expulsiones fáciles
En un partido marcado por tarjetas que se fueron al limbo, llamó la atención la facilidad como el colegiado expulsó a varios miembros del Elche en el tramo final del partido. Así, por ejemplo, echó a Fran Escribá cuando este daba órdenes a sus jugadores de que estuvieran atentos al rechace del penalti.
"Me ha ha echado por que sí", dijo el técnico al final del partido. También expulsó al preparador físico y al propio Carlos Sánchez por protestarle su decisión. Después de un partido tan tenso, lo mejor habría sido mirar a otro lado. Ninguna de estas protestas fueron tan airadas como para merecer una expulsión. A Muñiz le faltó tacto para saber lo tenso que supone un final de partido así para un equipo como el Elche.
7.- Un acta muy leve
El último error del partido llegó pasado el partido, cuando al redactar el acta, Muñiz no fue lo suficientemente valiente como para incluir las declaraciones literales de los jugadores o técnicos que fueron expulsados. Simplemente se limita a señalar que vieron las cartulinas por protestar sus decisiones. Nada de entrecomillados, como suele ser habitual. Ahí sí, Muñiz decidió mirar para otro lado, quizá demasiado tarde.