Sergio Ramos insiste con Mourinho: "Tras el United, me hubieran gustado otras palabras"

Sergio Ramos, segundo capitán del Real Madrid y uno de los pesos pesados de la Selección Española (cumplirá el viernes 100 internacionalidades), ha vuelto a reavivar sus tensiones con José Mourinho al criticar las declaraciones que realizó el luso tras el partido frente al Manchester United en Old Trafford. Aquella noche, el portugués se quejó de la actitud de su equipo y dijo que "no ha ganado el mejor", pese a que habían sido los suyos los que se habían llevado el triunfo por 1-2. "A mí evidentemente me hubiera gustado escuchar otras palabras de reconocimiento a tu equipo. Hicimos algo histórico, nos dejamos la piel. No estoy diciendo que me molestase", replicó el futbolista.

En una entrevista concedida en El Partido de las 12 de la Cadena Cope, el andaluz, además, reconoció que las relaciones con el portugués habían pasado por momentos duros.

"He llegado a tener alguna diferencia con los entrenadores, pero nunca faltando el respeto. Me gusta decir lo que pienso a la cara. Como lo hice con Mourinho en su día también lo hice con Aragonés", ha admitido, eso sí, con mensaje extra hacia su actual preparador, toda vez que Ramos afirma no haber discutido nunca con Del Bosque.

Piropos a Del Bosque

"Con Vicente que jamás he tenido ni una discusión. Yo creo que eso va en el carácter de cada entrenador. Tanto Luis como Mou son entrenadores con mucho carácter, hermos llegado a tener alguna diferencia por el bien del equipo. Vicente creo que no ha tenido problemas con nadie a lo largo de toda su vida", afirmó.

La referencia a Del Bosque el mismo día que Mourinho denunció irregularidades de la FIFA en la votación a mejor entrenador del pasado año no pasó inadvertida. El luso afirmó que no acudió a la gala de Zúrich porque había recibido denuncias de votos manipulados. Era un mensaje con destino a la propia FIFA y a un Del Bosque con el que no se lleva especialmente bien.

De este asunto, Ramos no quiso mojarse demasiado. "Ya se verá si es demostrable o no. No sé si Vicente está enfadado. Los tres nominados son tres grandes entrenadores", comentó.

El futuro de Mourinho

Al respecto del futuro de 'The Special One', Ramos no se pronunció, aunque también dejó otro mensaje entre líneas. "No lo sé. A día de hoy, tiene contrato, y eso es una decisión personal. Él siempre ha hecho hincapié en la felicidad de su familia. ¿Pero dónde va a estar más a gusto que defendiendo los colores del mejor equipo del mundo?", contestó.

Él, Ramos, lo tiene claro. Se quede o se marche el técnico del Real Madrid, se quedará en el Bernabéu. "Tengo contrato aquí, y mi ilusión es seguir muchos años. Para mí, nunca ha sido incoveniente ningún entrenador".

Roces a lo largo del año

Con respecto al momento actual, el zaguero dice que su vinculación con el luso es "súper profesional" y advierte que "Sería muy torpe sacar problemas, porque estamos en un momento muy delicado de la temporada".

Pese a ello, Ramos dejó claro cómo le gusta a él que se gestionen los asuntos del equipo merengue. "Hay mucho fanático, y muchos tendrán como ídolo a Mou, y le defenderán a muerte. Yo soy más de puertas a dentro", analizó con respecto a críticas pasadas y a roces con aficionados blancos partidarios del técnico y no tanto del futbolista.

Sin embargo, y pese a ello, Sergio Ramos no desmintió algunos roces pasados, como el de la famosa camiseta de Özil o la bronca entre Cristiano Ronaldo y Mourinho tras el duelo de octavos de final de Copa del Rey jugado en el Bernabéu.

Al respecto del primero, quiso restar hierro al asunto. "Expliqué en su día que no formaba parte de un pulso con Mou. Con Özil son de esos jugadores que tienes un feeling desde el primer día, me volqué con él. Se hizo vecino mío. Hemos tenido una relación de hermano-compañero y en su día vi que lo estaba pasando mal", dijo.

Del segundo, no desmintió su veracidad, toda vez que Ramos afirmó que estuvo cerca de aquel incidente. "Sí, estaba cerca, siempre me gusta estar cerca de todo lo que sucede en el vestuario", dijo.

Para terminar, Ramos bromeó al respecto de su desliz con la Copa del Rey, cuando, en las celebraciones del título conseguido en 2011, tiró el trofeo y éste fue aplastado por el autobús del festejo. "Si me garantizas que la gano, la tiro nada más llegar a Cibeles", comentó entre risas.