El Milan, especialista en romper ciclos: ¿será el 'Pep Team' su última víctima?

El FC Barcelona se juega esta noche algo más que un simple pase a cuartos de final de Champions. Muchos coinciden en señalar que si los azulgranas no son capaces de remontar el 2-0 de Milán, y tras haber sido eliminado recientemente por el Real Madrid, se hará evidente el fin de ciclo del equipo con el estilo implantado con la llegada de Pep Guardiola.

Pero los temores de la afición culé crecen notablemente cuando se recuerda un factor histórico que, pese a no tener nada que ver con la situación actual, amenaza con reproducirse esta noche: el AC Milan es, por excelencia, el club que ha roto los ciclos de máximo esplendor de los dos grandes clubes de la liga española.

El terror de los mejores Madrid y Barça

Su primera víctima fue el Real Madrid de la Quinta del Butire. En 1989, tras una ida en el Santiago Bernabéu que acabó 1-1, los rossoneros entonces comandados por el revolucionario Arrigo Sacchi sentenciaban la eliminatoria con un contundente 5-0 en San Siro. La exitosa generación blanca liderada por los Butragueño, Míchel y compañía jugaban así su última semifinal en Copa de Europa, lo cual anticipaba ya un fin de ciclo que se confirmaría un año después con la consecución de su último título liguero antes de la era Cruyff.

Y, precisamente, aquel Dream Team del técnico holandés fue la segunda gran víctima de los verdugos del Milan, también con una recordada paliza. Era mayo de 1994 y ambos equipos disputaban la final de la Copa de Europa en Atenas, donde el Barça buscaba su Segunda tras la conseguida en Wembley dos años antes. En la Liga, el dominio de los de Cruyff era incontestable, con cuatro Ligas consecutivas, pero entonces se cruzó en su camino el Milán de Fabio Capello: un contundente 4-0 acabó con el aura que había acompañado a aquel equipo de ensueño durante los últimos cuatro años.

Ahora, es Allegri quien quiere repetir aquellas gestas de sus predecesores, batiendo al que todos consideran el mejor equipo de Europa y cuyo estilo es, precisamente, herencia del Dream Team. Por descontado queda que el 2-0 de la ida no les obliga a jugar al ataque sin reservas y que se espera el clásico catenaccio italiano, pero si el Barça cae hoy en el Camp Nou, el Milán lo habrá vuelto a hacer: nunca a ningún otro equipo se le habrá dado tan bien acabar con los mejores.