Casillas, Xabi Alonso, Sergio Ramos y sus presiones para fichar a Llorente

Hay caso Llorente. Lo hay desde hace tiempo, pero la ovación del Bernabéu al delantero del Athletic de Bilbao el pasado sábado ha disparado un asunto que parece encarrilado. El Real Madrid lo quiere y Mourinho ha dado el visto bueno. Es lo que intuyeron los directivos rojbilancos el día del partido de sus charlas con sus colegas merengues.

Un proceso que, de completarse, vendría a confirmar uno de los fichajes más comentados y esperados por parte de los madridistas, ansiosos por llenar de campeones del mundo su equipo y necesitados, además, de jugadores españoles con los que darle más identidad nacional a la casa blanca.

Desde que en 2010 Iker Casillas levantara la Copa del Mundo en Johanesburgo, el hombre de Llorente ha estado en la órbita de los dos grandes. Madrid y Barça se lo han disputado, aunque, finalmente, todo apunta a que se decantará por los de Concha Espina. No es cosa de la casualidad.

El propio Casillas podría tener mucho que ver en su fichaje. Él, y Xabi Alonso y Sergio Ramos y, en general, todos sus compañeros del Real Madrid en la Selección Española. Ellos forman parte del 'lobby' que ha presionado para buscar un fichaje que hoy parece más cercano que nunca.

Si está cercano, ha sido porque estos internacionales no han pardo de hablar del ariete cuando la ocasión lo ha permitido. Lo han hecho con directivos y compañeros, miembros de cuerpo técnico y periodistas. Su llegada, por decirlo de alguna manera, ha sido intensamente recomendada.

Y es que, en opinión de algunos de estos jugadores, desaprovechar una oportunidad como la de Llorente sería imperdonable. Más si cabe teniendo en cuenta que en apenas un mes cualquier club podrá negociar con él para hacerse con sus servicios el próximo mes de junio y por cero euros. Ganga.

Había que aprovechar la ocasión. Había que fomentar su figura dentro del vestuario y sobre todo ante José Mourinho, clave final para decidir si Fernando es o no apetecible para la casa blanca al igual que lo fue en los otros dos casos de internacionales españoles que fueron descartados por 'The Special One'.

David Silva y Santi Cazorla pudieron vestir de blanco, pero el entrenador del Real Madrid lo impidió. No eran jugadores de su gusto, aunque sí de estos internacionales. En su mente, la de los españoles, fue, por lo tanto, naciendo una idea: tratar de dejar entrever las ventajas de incorporar al delantero.

No es que los jugadores en un club como éste decidan los fichajes, pero saben que pueden recomendar jugadores. Es lo que sucedió con Varane en 2011, cuando Benzema hizo campaña por su llegada. Lo conocía de la liga francesa y, junto con Zidane, hablaron mucho y bien a Mourinho.

Algo parecido han hecho ahora los españoles blancos. De hecho, un reciente desliz de Xabi Alonso podría ir encaminado precisamente a este asunto. El mediocampista del Real Madrid coló en 'Twitter' un supuesto mensaje privado.

"Le digo a Mou que te considere, y de paso elevamos la categoría del vestuario", escribió en su perfil. Este mensaje se trataba, en realidad, de un mensaje privado que fuentes cercanas al jugador se encargaron de desmentir afirmando que era para su mujer a propósito de su hijo y una foto con Mourinho. Lo cierto es que fuentes cercanas al Real Madrid no descartan de que, en realidad, Llorente fuera el destinatario.

El pasado sábado, durante el partido. Sergio Ramos e Iker Casillas le dedicaron todo tipo de mimos. El primero, lo saludó con una efusividad infrecuente en el túnel de vestuario y, tras el choque, se quedó un rato largo charlando con él en el césped. Iker, por su parte, le abrió las puertas del vestuario blanco y se hizo una foto con él que luego colgó en su perfil de Facebook. Era su forma de mimar a su amigo. Su manera de invitarle a elegir el Berrnabéu como próximo destino.

Guiños, movimientos y conversaciones que anticipan uno de los que podría ser fichaje del verano. Llorente vuelve al escaparate y si acaba de blanco será, en parte, culpa del lobby español de campeones del mundo en el Real Madrid.