Fútbol
Coentrao y sus fallos en los partidos clave del Real Madrid
Mourinho insiste. Una y otra vez repite su decisión y su principal beneficiado, una y otra vez, sigue sin dar la talla deseada. Fabio Coentrao y su alineación contra el CSKA de Moscú volvió a desatar la controversia en el madridismo. El lateral portugués cuajó una mala actuación. No ha sido la única. Desde que aterrizó en el Bernabéu su nivel en las grandes citas ha dejado mucho de qué desear.
En algunos casos no se le puede achacar sólo a él y sus cualidades las carencias que ha demostrado. Ejemplo claro de ello fue cuando Mourinho lo alineó de lateral derecho frente al Barça.
Fue en el Clásico de Liga que el Real Madrid perdió por 1-3. En aquella ocasión, los jugadores merengues, especialmente los españoles, se mostraron muy enfadados por el ataque de entrenador de 'The Special One' e incluso señalaron a su compañero como el máximo responsable de aquel desbarajuste. El Clásico de Copa (ida en el Bernabéu) y el partido en Moscú completan su nómina de malos duelos en choques clave.
¿Por qué Coentrao y no Marcelo?
Si los fallos se repiten con cierta frecuencia, la pregunta que precedente cobra sentido. Más si cabe teniendo en cuenta que Marcelo, en sus últimas temporadas, ha ganado en presencia en el equipo blanco y no sólo en ataque. También en defensa.
Pues bien, esta visión del brasileño no es la misma que tiene Mourinho. Él sigue insistiendo en que Coentrao tiene menos despistes que su jugador 'fetiche', el hombre por el que apostó este verano obligando al Real Madrid a invertir 30 millones de euros, sólo cinco menos de los que el verano anterior costó la salida de David Silva del Valencia al Manchester City.
Por eso lo pone una y otra vez en los duelos importantes. Cree (y nadie parece haberle hecho cambiar de opinión) que en esos choques Marcelo falla. Coentrao no ¿Es realmente así? Hagamos memoria.
Real Madrid 1- 3 Barcelona
Coentrao jugó este duelo de lateral derecho. Era el método de Mourinho para frenar las embestidas de los extremos culés. El experimento fracasó estrepitosamente. Iniesta entró por la banda izquierda, a pierna cambiada, como quiso. Suyo fue el fallo de marcaje que acabó dando con el 1-3 en el tanto de Cesc. Además, en el 1-2 de Xavi la pelota salió rebotada de su pierna en un mal despeje hacia el centro.
Real Madrid 1-2 Barcelona
Coentrao volvió a jugar. Lo hizo, esta vez sí, en su puesto. De lateral izquierdo. Sin embargo, no hubo mejorías. La entrada de Alves y Adriano por ese costado fue constante. Tampoco hubo capacidad ofensiva por parte del ex del Benfica.
La obsesión de Mourinho por defender no le permitió al jugador merengue permitirse ninguna subida a la banda. La mala actuación de Altintop, Carvalho y Pepe ocultó otro naufragio del 15 merengue.
CSKA 1-1 Real Madrid
Se puede considerar otra de las malas actuaciones del futbolista en el Real Madrid en un choque clave. El error más evidente, el de la falta cerca de la frontal que termina dando lugar al gol del empate. Mourinho había insistido en los últimos días sobre la importancia que tenía para los merengues no fallar en este tipo de acciones para no dar ventaja al rival.
Para colmo, la entrada de Oliseh por Musa supuso un problema intenso para Coentrao, ya que el nigeriano lo volvió loco. A punto estuvo de ganarse la expulsión por una patada a destiempo y en más de una ocasión perdió la marca. Suerte que el CSKA no tiene potencial ofensivo y estos despistes quedaron tapados por la escasa calidad del rival.
La eterna sospecha de Mendes
Detrás de la constante confianza de Mourinho sobre Mendes siempre está la sospecha de que ambos comparten agente, si bien Marcelo también tiene como representante al mismo hombre. Quizá sea una manera de defender la posición que tomó en verano, cuando insistió en el fichaje del luso pese a que su precio parecía desorbitado.
En un primer momento se defendió la medida como la llegada de un hombre que daría oxígeno y movilidad al centro del campo. Sin embargo, tras unos malos primeros partidos en esa posición, Mourinho empezó a darle oportunidades en un lateral donde sigue sin hacerlo mejor.