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Luis Miguel Ávalos: "La crisis se nota sobre todo en seguros de automóvil y vida-riesgo"

    Luis Miguel Ávalos, director del área de seguros personales de Unespa. <i>Foto: Archivo</i>


    A Luis Miguel Ávalos, director del área de seguros personales de Unespa, la crisis financiera no le preocupa porque opina que somos uno de los mercados más solventes del mundo y que aquí no se han cometido excesos, sino todo lo contrario, se ha gestionado el dinero de los clientes con una extremada dosis de prudencia.

    ¿Cómo se ha comportado el sector asegurador en conjunto?

    Ligeramente mejor que el conjunto de la economía. El seguro tiene un cierto componente anticíclico que le hace especialmente resistente cuando las cosas van mal y, a cambio, cuando todo va muy bien, a nosotros nos suele ir razonablemente bien. Con los datos que conocemos, en los tres primeros trimestres de este año, el seguro ha crecido algo más de un 6% apoyado fundamentalmente en salud, multirriesgo y en el seguro de vida.

    Respecto a los seguros de vida destinados al ahorro hay que precisar que si bien las primas han crecido mucho, un 10%, el dato del ahorro gestionado ha crecido solo un 1,4%. Esto se debe a que hay muchos movimientos de entradas y salidas tanto en los seguros de vida como en el resto de los sistemas de ahorro, propiciado por la volatilidad de los tipos de interés y por la ausencia de incentivos fiscales para el ahorro a medio y largo.

    ¿Cómo valora los importantes crecimientos que están experimentando los productos de ahorro para la jubilación, PIAS y PPAs?

    Son dos productos relativamente nuevos, lo que ya de por sí justifica los incrementos superiores al 100% que están registrando. El Plan de Previsión Asegurado (PPA) es una excelente vía para garantizar nuestro ahorro más querido, el de la jubilación. Tiene los mismos beneficios fiscales que los planes de pensiones y cero riesgo para el ahorrador, al tener que garantizar un tipo de interés mínimo para las aportaciones. Creemos que va a seguir creciendo en el futuro a medida que lo vayan conociendo más clientes.

    El Plan Individual de Ahorro Sistemático (PIAS) es también un producto a medio y largo plazo, con incentivo fiscal, pero disponible si se necesita antes de la jubilación. Excepto unos pocos que están ligados a productos unit linked, la inmensa mayoría aporta la tranquilidad de un ahorro garantizado, y el atractivo de una rentabilidad elevada, ya que las aseguradoras han avanzado notablemente en la reducción de sus costes para poner más valor en el producto que ofrecen al cliente.

    ¿Está la banca comiendo terreno a las aseguradoras?

    Es bueno que el ahorro financiero de las familias esté diversificado en varios instrumentos, como los depósitos bancarios, los seguros de vida, los planes de pensiones y las instituciones de inversión colectiva (fondos de inversión, principalmente). Lo deseable para el sistema financiero y para el ahorrador es que todos estos instrumentos de ahorro crezcan, como ha venido pasando en los últimos años, ya que ello favorece la competitividad.

    Esta crisis nos ha enseñado que es un error el haber fomentado el monocultivo en vivienda. Lo deseable para un sociedad estable y comprometida con su futuro es que se incentive, y no só lo fiscalmente, el ahorro a medio y largo plazo y que se haga sobre cualquiera de los productos que ofrece el mercado con el objetivo de estabilidad en el tiempo.

    ¿Cómo cree que terminarán el año?

    En estos momentos nadie tiene claro qué será de cualquier sector a un mes vista, pero creo que el cierre no será muy diferente a lo que ya conocemos para los tres primeros trimestres del año. En todo caso, un año más, el seguro va a crecer por encima de lo que haga el conjunto de la economía.

    Pero, ¿se está notando la crisis económica en el sector?

    Por supuesto que sí. El seguro no sólo es garante de bienes y personas, sino también soporte de la actividad económica. La crisis financiera no nos preocupa porque somos uno de los mercados más solventes del mundo y aquí no se han cometido excesos, sino todo lo contrario, hemos gestionado el dinero de nuestros clientes con una extremada dosis de prudencia.

    La crisis económica es otra cosa. Se está notando especialmente en los seguros más afectos a las actividades más afectadas por la crisis, como el seguro del automóvil, el seguro de vida-riesgo (fallecimiento) que venía creciendo en línea con el mercado hipotecario, o el seguro de crédito, que ya ha entrado en un momento de desajuste en su cuenta técnica (situación por otra parte prevista porque el seguro de crédito guarda dinero en los años buenos para cuando lleguen los años malos).

    En el resto de los ramos, la afectación es menos intensa, pero no cabe duda que tiene su impacto.

    ¿Cómo pueden las aseguradoras minimizar su impacto?

    Haciendo lo que ya hacemos, ser muy prudentes y dotarnos de recursos en los años buenos para cuando lleguen los malos. El seguro no es un sector que coja los beneficios y salga corriendo con el dinero. Hemos gestionado de manera muy solvente los años buenos de la economía española y esto nos da mucha tranquilidad para afrontar el actual escenario de crisis.