La discoteca Kiss lamenta la tragedia y dice que su personal es "preparado"
La administración de la discoteca brasileña Kiss, donde se produjo en la madrugada un incendio que dejó al menos 233 muertos y 106 heridos, lamentó el incidente e informó de que sus trabajadores están "debidamente entrenados y preparados para cualquier situación de contingencia".
Kiss asegura que la prioridad de la discoteca es prestar toda la asistencia posible a los supervivientes y a las familias de las víctimas y que por ello se está facilitando toda la información posible, así como un "equipo multidisciplinar" formado por psicólogos, médicos o asistentes sociales, entre otros.
Además, la discoteca rompió una lanza por su equipo de trabajadores, de los que dijo que "poseen la más alta cualificación técnica y están debidamente entrenados y preparados para cualquier situación de contingencia".
El comunicado termina informando de que sus operaciones se encuentran suspendidas "por tiempo indeterminado" y que están a disposición de las autoridades "desde ya" para esclarecer los hechos que causaron la tragedia.