La opositora Suu Kyi pone a prueba las nuevas libertades en Birmania
La principal opositora birmana, Aung San Suu Kyi, pone a prueba hoy las nuevas libertades en su país con su primer viaje con fines políticos en ocho años, después de que el régimen militar entregase el poder a los civiles -casi todos ellos exmilitares- en marzo.
La nobel de la paz Suu Kyi, de 66 años, ha elegido un programa sencillo y simbólico para tantear la disposición de las nuevas autoridades: su desplazamiento de Rangún a Bago (unos 80 km) para inaugurar una librería y participar en un foro de jóvenes.
El viaje de Suu Kyi se produce dos días después de que se volviese a reunir con el ministro birmano de Trabajo, Aung Kyi, en lo que es visto por algunos analistas como un aparente cambio de actitud del régimen.
"Nos vamos a reunir frecuentemente en el futuro", afirmaron la opositora y el ministro al término de su entrevista en una residencia gubernamental de Rangún.
El mes pasado, el Gobierno del primer ministro, Thein Sein, reanudó los contactos oficiales con Suu Kyi después de que Estados Unidos indicase que Birmania (también conocida como Myanmar) necesita probar a la comunidad internacional que avanza en la dirección correcta antes de poder hablar del levantamiento de sanciones.