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Brexit, 'Catalexit': mentiras populistas


    Miguel Ángel Bernal Alonso

    La lacra del populismo barato, torticero, supremacista, egocéntrico, pero ante todo mentiroso y manipulador golpea al mundo en esta segunda década del siglo en el que vivimos. En Europa, además, con mucha más virulencia, movimientos fascistas, de exclusión de organización y acuerdos, secesionistas, todo un abanico de posibilidades. Una Europa que tiene que lidiar con el fuerte envejecimiento de su población, las presiones de Trump, de Putin, los problemas en Turquía y la irresponsabilidad del Brexit. Todo ello en medio de un fuerte cambio en el contexto geopolítico y económico con la irrupción de China. Pues bien, a todo ello se añade ahora el desafío secesionista de Cataluña, una muestra más del populismo rampante y que en estos momentos nos golpea.

    Los sediciosos catalanes, todos ellos al margen o con una utilización retorcida de las leyes, tienen muchos puntos en común con los que en Reino Unido apoyaron el Brexit. Algunos quieren equipararlo con Escocia, sin embargo olvidan la historia, dado que Escocia fue reino, mientras que Cataluña nunca lo ha sido. Esa idea manipulada de que Cataluña fue reino surge de la época carolingia y la marca hispánica, donde el condado de Barcelona fue ganando protagonismo y fuerza frente a sus vecinos. Posteriormente reforzado por la guerra de los segadores en 1640 y 1652 y renacido el conflicto en 1714 entre los aguiluchos que apoyaban a los austriacos y los butifleros que seguían a Felipe V. Desde luego, los secesionistas llevan haciendo un papel fundamental en la manipulación sucia de la historia, ya saben que hasta Miguel de Cervantes Saavedra fue catalán y que el Quijote se escribió en catalán y traducido posteriormente al castellano.

    Por mucho que quieran los muñidores a su antojo de las leyes y lo que es la democracia en Cataluña y resto de España, Catalexit es similar a Brexit. Lo es porque los que atizan el juego del populismo esconden la verdad o simplemente mienten.

    Al igual que el UKIP a quien Europa les robaba, los sediciosos dicen que España les roba. Esgrimían hasta hace poco las balanzas fiscales de la confusión, mentira que desmontó convenientemente y con todo lujo de detalles Ángel de la Fuente desde Fedea en su estudio ¿Qué nos dicen las cuentas territorializadas? Reproduzco una frase que está en el apartado de conclusiones: "Lo que podríamos denominar el componente potencialmente preocupante de los saldos fiscales regionales es relativamente reducido". Pero es que en ese mismo estudio Ángel nos señala que el problema tiene una solución bastante fácil: "Estamos hablando, como máximo, de reasignar de una forma más razonable el equivalente de un 1,1 por ciento del PIB nacional, la tarea no debería ser imposible. Pero convendría ponerse a ello, cuanto antes mejor." Imprescindible lo de ponerse a ello lo antes posible.

    No es tampoco un problema de movimientos y derechos de trabajadores. Tema similar al del Brexit, nueva manipulación. En Reino Unido es aquello de que los extranjeros les quitan los puestos de trabajo, aquí es por ejemplo que en Cataluña las pensiones estarían aseguradas y además serían más altas. Quien dice eso o consume LSD como el que se toma un café o está manipulando totalmente la verdad. Este diario, elEconomista, esta misma semana informaba de la situación de las pensiones en Cataluña. Les recomiendo la lectura del artículo: Cataluña genera el 25% del déficit de la Seguridad Social, publicado el 19 de septiembre. Además, habría una fuerte salida de trabajadores que se verían obligados a irse, puesto que Cataluña no pertenecería a la Unión Europea y, por tanto, tendría serios problemas para vender sus productos, máxime teniendo en cuenta que encima en el mercado español la venta tendría aún muchos más problemas. El profesor de economía Ferrán Brunet lo manifiesta con toda claridad y contundencia: "La separación tendría gravísimas consecuencias sobre la economía catalana, cuya posición se debe a las ventas al resto de España, una reducción del 45 por ciento del comercio con las demás autonomías provocaría que el PIB cayese un 14,2 por ciento y el empleo catalán, un 16,3 por ciento". ¿Qué tiene que decir el populismo barato de la CUP frente a esto? Ferrán tiene razón, la balanza comercial es la clave, lo que conduce al empobrecimiento.

    Qué decir de la inflación. Si a Reino Unido con un potente Banco Central y con un fuerte nivel de reservas le afecta, qué sería de Cataluña. Sin apoyo del Banco Central, los bancos catalanes cambiarían el domicilio social con una fortísima salida de dinero. Algunos tienen la solución, los bancos catalanes se establecen en España, crean filiales, la casa matriz obtiene dinero en el BCE y se lo inyecta a la filial. Veís españolitos, qué fácil. Pues no, no es fácil y quien dice esto miente o no sabe de lo que habla. El BCE prohíbe expresamente la transferencia de flujos de un banco matriz a sus filiales en otros países.

    Son similares, Brexit y Catalexit, porque desde las instituciones, que tienen que velar por informar y proteger a sus ciudadanos no lo han hecho. La situación de Cataluña era algo que se veía venir, la presencia del Gobierno de España y de los catalanes ha brillado por su ausencia, allí. Han tenido que surgir instituciones como Societat Civil Catalana, que llevan denunciado hace mucho tiempo la situación y que preveían con toda claridad lo que iba a ocurrir: La quiebra y la ruptura de una sociedad como la catalana, la amenaza de los derechos fundamentales de los catalanes cuya máxima expresión es la Constitución.