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Peaches Geldof, vida y muerte de una estrella precoz

    Zeleb


    Peaches Geldof vivió muy deprisa y cuando quiso frenar fue demasiado tarde. La hija del mítico Bob Geldof, fallecida con tan sólo 25 años de edad, era salvaje, divertida, inteligente, ingeniosa y alocada, según palabras de su propio padre. Un cóctel de talento y descaro que ha terminado con un viudo, el músico Thomas Cohen, y dos peques huérfanos de madre, Astala y Phaedra. Y una historia que se repite, pues la madre de Peaches, Paula Yates, falleció de sobredosis en el año 2000. El destino y sus macabras coincidencias. 

    Viviendo deprisa

    Pero lo cierto es que los 25 años de Peaches le dieron mucho de sí. No en vano, comenzó a trabajar a los 15 años y no en cualquier sitio, sino en la edición británica de la revista Elle. Casi nada al aparato. Ser hija de una estrella del rock te puede abrir muchas puertas, pero para mantenerse dentro hay que valer, y Peaches valía. Su lengua mordaraz, su talento y su apellido la convirtieron en la it-girl de moda y objetivo de todos los paparazzis ingleses. Algo a lo que su modo de vida también ayudaba, pues era habitual de todo tipo de saraos. Un modo de vida a la diseñadora y ex de Mick Jagger, L'Wren Scott, también fallecida en extrañas circunstancias.

    Eso sí, una y otra vez tenía que negar su adicción a las drogas y evitar la comparación con su malograda madre, aunque no ocultaba que había tenido sus escarceos con algunas sustancias prohibidas. Algo que tampoco ocultaba el malogrado actor Philip Seymour Hoffman, quien hace dos meses pasó a engrosar la lista de famosos fallecidos por sobredosis.

    Dos matrimonios, dos hijos

    Este modo de vida fue el que llevó a Peaches a cometer una locura a los 19 años: casarse con el rockero Max Drummey. Y decimos locura porque el matrimonio duró seis meses, por lo que no tiene pinta de que fuera buena idea desde un principio. Con quien parecía ir mejor la relación era con su actual marido. Thomas Cohen había conseguido amansar a la fiera, que había cambiado locales discotecas por cunas y alcohol por biberones. Y es que en muy poco tiempo, Thomas y Peaches tuvieron a sus dos hijos, Astala y Phaedra. Ambos parecían felices, unidos y calmados hasta que llegó la desgracia. 

    Por el momento no se han dado detalles de la muerte y la policía investiga las causas de la muerte. Una vez se realice la autopsia, podremos determinar si la historia se ha repetido o si la joven Peaches ha sufrido algún tipo de percance inesperado. Sea como sea, descanse en paz. 

    Fotos: Gtres e Instagram