Gente y estilo

Una colección de Barbies negras reivindica la "multiculturalidad" de esta muñeca



    Vigo, 21 mar (EFE).- La viguesa Begoña Otero atesora la mayor colección de Barbies negras de España, con la que, aparte de satisfacer una pasión personal, pretende demostrar la "multiculturalidad" de esta muñeca, que va "más allá del mundo rosa" con la que se le relaciona.

    Casi un centenar de muñecas Barbie afroamericanas ha conseguido reunir Otero, la mayoría en los últimos cuatro años, cuando empezó a coleccionarlas "en serio".

    Antes había adquirido alguna de forma esporádica para ofrecerle a su hijo, de origen etíope, juguetes en los que se viera reflejado, según explica en declaraciones a EFE.

    Curiosamente, esta viguesa nunca tuvo una Barbie de pequeña, pero desde que comenzó a adquirir los primeros modelos, la mayoría por internet, ya no ha podido parar, y ahora sus presas más valiosas son las muñecas de colección.

    El principal nicho de mercado de Barbies negras está en Estados Unidos, donde, según explica Otero, los diseñadores sacan la mitad de las colecciones del modelo caucásico y la otra, del afroamericano.

    Ahora bien, la mayoría de las muñecas que conforman su colección no están a la venta, por lo que se las tiene que ingeniar para contactar con coleccionistas. "Hay que bucear mucho en la red para encontrar las que te interesan", confiesa.

    Aunque asegura que a todas las "quiere igual", hay varios modelos a los que les tiene "un cariño especial", como una de 1985, la más antigua que ha podido adquirir hasta la fecha, tocada con un bañador estampado y una larga melena anudada con un lazo amarillo.

    Sus otra niña bonita es "The voice of South Africa", cotizada en unos 300 euros, de su diseñador de Barbies favorito, Byron Lars, de la Séptima Avenida neoyorquina, cuyos diseños, destaca Otero, son "espectaculares, extravagantes".

    También forman parte de esta colección una muñeca motera, el personaje de "Catwoman", de Batman, o el de Lt. Uhura, de la saga Star Trek.

    Begoña Otero señala que su pasión por las Barbies se explica en que es "la más versátil" de todas las muñecas, ya que "aunque estamos acostumbrados a imaginarla rubia y con ojos azules" sucede que es la más multicultural: "puedes encontrar desde una Barbie de Perú hasta una de Indonesia, cada una con sus rasgos", explica.

    Incide en que el coleccionismo de esta muñeca permite "muchos matices" y que cada cual puede encontrar su "nicho", como por ejemplo una compostelana dedicada a recopilar accesorios, con los que hace dioramas, mientras que otros vuelcan su pasión en diseñar sus propios vestidos.

    Otero tiene localizados a al menos unos 400 coleccionistas españoles a través de Facebook y tiene constancia de que hay quien posee algún ejemplar de Barbie negra, "pero no hay ninguna específica ni de este volumen", asegura.

    Por eso medita llevar su exposición a otros puntos de España, siempre que su trabajo se lo permita. EFE