Europa

El partido de Renzi, sacudido por la corrupción y el fraude fiscal

    Matteo Renzi. Imagen: Reuters

    Giovanni Vegezzi

    Dos nuevos escándalos sacuden al Partido Demócrata de Matteo Renzi a pocas semanas de las elecciones municipales. Simone Uggetti, delfín del vicesecetario del Partido, Lorenzo Guerini, y alcalde de Lodi (ciudad a pocos kilómetros de Milán), fue detenido la semana pasada por supuestas irregularidades en las contratas municipales. Unos días más tarde, el secretario del Partido en Sardinia, el empresario y expresidente de la región, Renato Soru, fue condenado por fraude fiscal.

    Estas dos noticias se suman a las investigaciones que en las últimas semanas han llevado a las dimisiones de la ministra de Industria, Federica Guidi, y del presidente del PD en Campania, Stefano Graziano, acusado de favorecer a la mafia napolitana.

    El daño de imagen para Renzi, que se propone como abanderado del cambio, es grande. Y no sólo de cara a las municipales que se celebran en junio en las principales ciudades de Italia (Roma, Milán, Nápoles y Turín), sino también al referéndum constitucional de octubre.

    El primer ministro, de hecho, ha anunciado que dimitirá en caso de perder la consulta sobre su reforma estrella que busca agilizar la aprobación de las leyes quitando poderes al Senado.

    Política migratoria

    Por otra parte, el primer ministro Matteo Renzi y la canciller alemana, Angela Merkel, han expresado su rechazo a los planes de Austria de construir una valla en la frontera con Italia y coinciden en la necesidad de una "política seria" por parte de la UE en materia migratoria.

    Renzi defiende que actualmente no hay ninguna emergencia migratoria en Italia que, según ha dicho, en 2015 recibió 26.000 inmigrantes, solo 1.000 más que en 2014. La postura de Austria respecto a la inmigración "va contra la lógica y contra la historia", zanjó.