Europa

Breivik es declarado sano y condenado a 21 años de prisión por la matanza de Oslo y Utoya

    Andres Breivik. <i>Imagen: Archivo</i>


    El tribunal de Oslo ha condenado a 21 de años de prisión al autor confeso de la matanza del 22 de julio de 2011 en Noruega, Anders Behring Breivik, y ha declarado, en contra de las pretensiones de los fiscales, que está "sano" y reúne las condiciones adecuadas para cumplir la pena en una cárcel.

    Se trata de la pena máxima que podía serle impuesta pero podría finalizar en cadena perpetua, ya que una vez cumplida la condena, esta se puede prolongar de forma indefinida si se considera que el reo sigue siendo un peligro para la sociedad.

    Breivik, que admitió haber activado una bomba compuesta por fertilizantes a las puertas de una sede gubernamental, matando a ocho, y de abatir a tiros a 69 personas en un campamento juvenil del partido en el gobierno, afronta la posibilidad de ampliaciones indefinidas de esa condena.

    Muchos supervivientes y familiares de las víctimas querían que fuera declarado cuerdo, alegando que lo contrario habría atenuado su responsabilidad en los ataques.

    Breivik aseguró que atacó al Partido Laborista de centroizquierda por su apoyo a la inmigración musulmana. Rechazó la calificación de asesino de niños, argumentando que sus víctimas, algunas de ellas de 14 años, eran activistas a los que se había lavado la cabeza y cuyo apoyo al multiculturalismo amenazaba con adulterar la sangre noruega pura.

    El propio Breivik había defendido el veredicto de cordura ya que quería que el ataque fuera considerado una afirmación política.