Europa
Muñecas rotas como símbolo de denuncia por los abusos a menores en Austria
Los defensores de los derechos de la infancia aseguran en Sankt-Pölten, Austria, que hay más casos como el de Josef Fritzl. Une ejemplo claro es el de Luca, el bebé de 17 meses que murió tras ser abusado por la ex pareja de su madre.
Blandiendo muñecas a las puertas del tribunal en el que se juzga al 'monstruo de Amstetten', este ha sido el paisaje hiperrealista que se podía contemplar este lunes, primer día del juicio contra Josef Fritzl por secuestro y abusos continuados a su hija.
En Sankt-Pölten, Austria, grupos en defensa de los derechos de la infancia se han lanzado a las calles para denunciar que el de Fritzl no es el único caso.
El 'caso de Luca'
Los activistas quieren aprovechar la presencia mediática internacional para señalar que la actitud del Gobierno austriaco en lo referente a los derechos de las víctimas es un completo desastre. Para ilustrarlo, Peter Rosenauer, en nombre del grupo Resistencia por la Paz, ha recordado el caso reciente de un bebé de 17 meses, Luca, que murió tras ser abusado sexualmente por la ex pareja de su madre, que ha sido condenado a cadena perpetua.
En la protesta no se ha escatimado detalle en la puesta en escena. En una de las manifestantes se han arrojado muñecas al suelo, mientras que una persona expulsaba por la boca una simulación de sangre. Algunos de los policías apostados frente al juzgado han tenido que frenar a los activistas debido a su proximidad a la zona de acceso al juzgado