FP DUAL: Una herramienta eficaz contra el desempleo juvenil
- Esta Formación Profesional dual aporta ventajas competitivas
Noelia García
Madrid,
La formación dual de Alemania exige a sus aprendices y es un modelo de escaparate global. Cada vez más los jóvenes cambia la universidad por una Formación Profesional dual.
Esta Formación Profesional dual aporta ventajas competitivas sobre otros países del mundo y se ha convertido en los estudios profesionales más cercanos a la realidad del mercado laboral. La creciente de-manda de perfiles cada vez más especializados, el cambio constante de la oferta laboral y el auge de la digitalización en los diferentes sectores, explican el éxito de este tipo de formación en constante contacto con la realidad empresarial.
Se trata de un win-win para todos, las empresas y los alumnos. La empresa o formación dual es probablemente el tipo más conocido en Alemania. Durante este tiempo se alternan la teoría y la práctica. Este método brinda experiencia práctica desde el principio y garantiza una inserción laboral superior al 70 por ciento tras los estudios, que se imparten en España desde el curso 2013-2014. Desde entonces, más de 10.000 empresas y 900 centros educativos han ofrecido vacantes de aprendiz dentro del modelo de FP Dual, con más de 24.000 alumnos inscritos en el curso 2016-2017.
La Alianza para la FP Dual, impulsada por la Fundación Bertelsmann, conjuntamente con la Fundación Princesa de Girona, la Confederación Empresarial de Madrid-CEOE y la Cámara de Comercio de España, aglutina las mejores iniciativas y experiencias de FP Dual en las empresas y centros educativos españoles. Las últimas adhesiones a la Alianza para la FP Dual, con las que se ha llegado a los 1.000 miembros, han sido las del Círculo de Empresarios, Accenture, la Fundació BCN Formació Professional y el centro educativo Ribamar (Sevilla).
Dos años de formación
La duración del aprendizaje depende de su ocupación, pero el período de formación habitual es de entre dos y tres años y medio, dependiendo del país. Sin embargo, bajo ciertas circunstancias, la capacitación en el sistema dual también puede acortarse: si se desempeña particularmente bien, si ya se ha adquirido experiencia laboral o si se tiene un diploma de una escuela superior.
Más de la mitad de todos los jóvenes alemanes comienzan un programa de capacitación dual, según la Oficina Federal de Estadística. El modelo, que solo está disponible en forma comparable en Austria y Suiza, es admirado en todo el mundo y es el elegido para más y más países. En estos países, con una capacitación en el sistema dual, se gana dinero a la que vez que uno se forma. La compensación en educación suele ser de entre 350 y 750 euros (brutos) en estos países y aumenta con cada año de formación. Por supuesto, la educación dependerá de la profesión de formación, la empresa de formación y la industria en la que se trabaja. En Alemania, la cooperación en materia de formación profesional está integrada en el compromiso del país con los objetivos de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas para el Desarrollo y la política multilateral de desarrollo, como el G-20.
Además de en España, que aún no está muy implementada, pero que en estas elecciones (26 de mayo) se ha demostrado que los partidos tanto a nivel regional como local sí están dispuestos a apostar por ella para que las empresas encuentren a los trabajadores que necesitan.
China y EEUU están considerando introducir el sistema dual. Ejemplos de su eficancia tenemos varios; por ejemplo, en España el grupo Seat ofrece formación profesional de acuerdo con el modelo alemán. De hecho, tiene tres ciclos de formación dual: Técnico Superior en Automatización y Robótica Industrial, Técnico Superior en Programación de la Producción en Fabricación Mecánica y Técnico Superior en Mecatrónica Industrial. En esta misma línea, en 2010, Volkswagen lanzó un programa de capacitación en Kaluga, Rusia, basado en el modelo de capacitación dual, que ahora forma a técnicos en mecatrónica.
Camino que recorrer
El camino aún es largo que recorrer para España. Los alumnos reciben un salario mensual, que varía según la empresa y reciben la tutorización por parte de un empleado de esa misma compañía. No obstante, cursar una modalidad dual es muy residual aún. La mayoría de las empresas no se sienten responsables de la capacitación, no hay aprendices en el sentido alemán, y la calificación que existe allí goza de un mínimo de prestigio. Por ello, es necesario un cambio en los valores y la cultura las empresas. Los expertos coinciden en que los modelos duales deberían ser una piedra angular de los sistemas de FP en toda Europa para reducir el desempleo juvenil. La educación vocacional no es solo una herramienta efectiva contra el desempleo y la escasez de habilidades; también promueve el desarrollo sostenible de la sociedad y su coherencia. La formación profesional es un requisito previo importante para la competitividad de las empresas y, por lo tanto, para la creación de riqueza en una sociedad.
Características del aprendiz
Los aprendices firman un contrato de capacitación con una compañía por uno a tres años.
Al menos un tercio del aprendizaje se lleva a cabo de forma práctica en la empresa, en el último año de capacitación, incluso hasta un 65 por ciento.
Las horas de trabajo en la empresa no pueden exceder el 75 por ciento en el primer año y el 85 por ciento en el segundo y tercer año del convenio colectivo o las horas de trabajo legales. Se prohíben las horas extra o el trabajo nocturno, así como el trabajo por turnos. Los aprendices reciben un salario (con un promedio de 400 euros al mes) y tienen derecho a la seguridad social.