España
Guardias civiles: "¿Los cogemos? No lo sé, por lo menos retenerlos, que van para Ceuta"
El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, ha comparecido ante la Comisión de Interior del Congreso para dar cuenta de los detalles sobre la tragedia en la que perdieron la vida 15 migrantes cuando intentaban alcanzar a nado la playa ceutí de El Tarajal, reproduciendo los vídeos que grabaron las cámaras del SIVE y de la valla fronteriza y los audios de las conversaciones entre los agentes y el centro de control de la madrugada del 6 de febrero.
En una de ellas, los agentes advierten de que hay inmigrantes nadando y piden instrucciones: "¿Los cogemos? No lo sé -contestan en el centro operativo- por lo menos retenerlos y que no sigan avanzando, que van para Ceuta". La respuesta: "Es imposible, han pasado por detrás de nosotros y o los cogíamos o los dejábamos avanzar".
Se trata de algunos de los 23 inmigrantes que consiguieron alcanzar la playa española en la madrugada del 6 de febrero. Según ha explicado Martínez, estas personas que "fueron rechazadas en frontera y entregadas a las fuerzas marroquíes a las que habían superado y que les estaban reclamando" llegaron ilesos a la costa española, pese al uso de pelotas de goma y botes de humo por parte de los agentes españoles para intentar evitar la entrada.
"Ninguno de los inmigrantes resultó alcanzado por el uso de ese material, llegando sin lesiones ni heridas a la playa del Tarajal", ha asegurado Martínez, para incidir, además, en que "ni se lanzó material sobre los inmigrantes ni se observó que el lanzamiento provocara pánico en los mismos" y se utilizó "adecuándose a principios de proporcionalidad y oportunidad" con un "objetivo siempre disuasorio". | Interior se escuda en la 'valla' a la hora de depurar responsabilidades por Ceuta.
Además, ha atribuido la tragedia a la combinación de algunos factores, entre ellos que los inmigrantes creyeran que la profundidad del agua a la altura de espigón del Tarajal iba a ser similar a la del 17 de septiembre de 2013, cuando 91 inmigrantes pudieron entrar a esa misma hora (en torno a las 7:30 horas) porque la marea estaba baja y la altura del agua era de 1,45 metros.
Sin embargo, el día 6 de febrero había a esa hora pleamar y la profundidad de agua era de 2.11 metros, lo que unido a que los inmigrantes en su mayoría no sabían nadar, la entrada en masa y a la carrera, la excitación y el cansancio y la escasa visibilidad, pudo contribuir a la tragedia, según las conclusiones de Interior.
¿Cuánto material antidisturbios se uso?
La Guardia Civil lanzó 145 pelotas de goma desde la playa ceutí de El Tarajal y cinco botes de humo al mar el pasado 6 de febrero, cuando fallecieron quince inmigrantes ahogados en aguas marroquíes cuando trataban de acceder a nado a España.
Es el material antidisturbios que se empleó ese día, según ha detallado Francisco Martínez, que ha aportado vídeos con algunas de las imágenes de ese día, así como diversas comunicaciones entre los agentes.
Martínez ha querido dejar claro que "no hubo ninguna orden imperativa" a los agentes desplegados en la playa de El Tarajal de Ceuta para que evitasen "a toda costa la entrada" de inmigrantes a nado el 6 de febrero.
El número dos de Interior ha asegurado que además de las pelotas de goma lanzadas al agua, que no provocaron lesión alguna en los inmigrantes, ha dicho, se consumieron "botes de ocultación", un artificio que únicamente genera una "nube de humo" y, por tanto, resulta "inocuo". Además, ha añadido que este tipo de material en contacto con el agua se apaga y deja de funcionar.
El secretario de Estado también ha detallado que 56 guardias civiles participaron en el despliegue para evitar la entrada de inmigrantes ese día, entre ellos cuatro buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas, así como un módulo de intervención rápida (MIR) integrado por veinte agentes y todos los efectivos de turno del centro operativo de Ceuta.
En aguas marroquíes
Martínez ha defendido "firmemente" que las 15 personas que perecieron lo hicieron en aguas marroquíes "en los primeros momentos del incidente, probablemente cuando los guardias civiles ni siquiera se encontraban desplegados en la zona". Según ha explicado, llegaron más tarde que los inmigrantes porque estaban apostados en la zona de la valla fronteriza, ya que "todo hacia prever que el intento se realizaría por un salto y no por el mar".
Con todo, ha abierto la puerta a la autocrítica: "Cuando a las puertas de nuestra casa se producen 15 fallecimientos, hay que hacer un análisis". En este sentido, ha destacado que la Guardia Civil en Ceuta lo ha realizado y ha llegado entre otras, a la conclusión de que "resulta imprescindible el estudio de nuevos medios antidisturbios o disuasorios para su utilización a la vanguardia de las vallas", que éstas deben recuperar su "valor como obstáculo eficaz" y que "deberá ser evitado" el uso de medios antidisturbios en el mar.