España

Prisión para los cuatro detenidos en España por captar y enviar yihadistas a Siria

    La Audiencia Nacional. <i>Imagen: archivo</i>


    El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha enviado a prisión a los cuatro detenidos el pasado viernes en España acusados de formar parte de una red internacional que se dedicaba a la captación y envío de yihadistas para su integración en organizaciones terroristas asentadas en Mali y Siria, han informaron fuentes jurídicas.

    El magistrado, que ha declarado el secreto de las actuaciones, ha dictado contra los cuatro prisión incondicional sin fianza. La operación se desarrolló en estrecha coordinación con los Servicios de Seguridad del Reino de Marruecos. En total, fueron arrestadas tres personas en Melilla y una en Málaga y otras tres en Marruecos. Algunos de ellos ya habían retornado tras su paso por zonas de conflicto como Siria, según el Ministerio del Interior.

    El principal dinamizador de esta red sería el ciudadano español detenido y residente en Melilla, Mustafá Maya Amaya, quien, a través de Internet, se encargaba personalmente de escoger a los yihadistas voluntarios, cualquiera que fuese el país de origen.

    Superada la fase de selección, contactaba directamente con ellos y les proporcionaba las relaciones necesarias para que pudieran llegar, a través de pasadores, a la organización terrorista de destino. Esta red disponía de ramificaciones en numerosos países tales como Marruecos, Bélgica, Francia, Túnez, Turquía, Libia, Mali, Indonesia y Siria.

    El Estado Islámico de Irak y Levante (ISIL), Jabhat Al Nusra (JN) y Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), todas ellas organizaciones terroristas en la órbita de Al Qaeda, fueron las principales receptoras de los voluntarios captados por esta red, cuyo destino último era bien su integración plena como dirigentes y activos partícipes en atentados y ejecuciones públicas, o su fallecimiento en el transcurso de operaciones terroristas cometidas en dichas zonas en conflicto.

    La operación se inició en el año 2010 bajo la supervisión del titular del Juzgado Central de Instrucción número 2. Las investigaciones tomaron un impulso definitivo cuando se detectó en el domicilio de Maya Amaya a varios yihadistas venidos de Francia, a los que había seleccionado previamente, y a quienes se disponía a preparar para su marcha a Siria de forma inminente.