Aznar: "Si CIU pacta con ERC será una coalición explosiva"

"Ya lo demostraron en 1934. Los nacionalistas cuando intentan gobernar los territorios que dicen que son suyos, normalmente organizan grandes líos". De este calado se expresó este lunes el expresidente del Gobierno, José María Aznar, con motivo de la presentación de su libro Memorias I, un documento en el que disecciona desde la juventud hasta el fin de la primera legislatura. Rato estuvo allí.

Un pacto explosivo

En plena tourné, y con el mismo interlocutor de este lunes, José María Aznar ha manifestado este martes que "el Estatuto de Cataluña ha sido un error, solo con derecho de opinión de una parte de España. Es verdad que puede plantearse una reforma de la Constitución, pero siguiendo unas leyes. Si se mantiene que lo que dice la ley es irrelevante, esa es una actitud golpista".

Ahora, se circunscribe a la actual situación en Cataluña, "si Convergencia i Unió hace un pacto con ERC, será una coalición explosiva. Allá lo que quieran hacer". "La Constitución le da al Gobierno elementos legales para evitar una situación como una consulta soberanista", ha matizado...

"Yo ahora no mando en el PP y no tengo nada que decir, pero yo creo que el PP no tiene que pensar cómo resolver el problema de CIU sino cómo hacer que Cataluña sea mejor en el futuro.. Cataluña está en bancarrota", ha determinado.

Aznar, quien ha afirma procurar estar de pie y estar sentado, ha despejado una duda: "Una cosa es que no esté en política, y otra que no tenga ganas de estarlo"

Prsentación del libro

Allí estaba toda la plana mayor del Partido Popular y buena parte de la vieja guardia del Gobierno de Aznar. El expresidente presentaba memorias. Un acto que se saltó la tradición y que tuvo a bien formular la presentación con una entrevista llevada a cabo por el periodista Carlos Herrera.

El cara a cara comenzó con el cuaderno azul. Aznar se refirió a él y a los muchos cuadernos azules que ha ido acumulando en sus años de gobierno, y en especial a aquel que estuvo a punto de perder en un convulso y turbulento vuelo camino a las Azores. Y a este respecto confesó "tener la esperanza de no estrellarme y de llegar al aeropuerto. La cuestión era, no que apareciera el cuarderno en el agua, si no que no apareciera en la tierra". En aquel cuaderno aparecía un nombre, en una sola hoja, el de Rajoy.

¿Le queda melancolía?, preguntó Herrera. ¿En qué? responde Aznar. "¿En el poder?", apostilla el presentador del acto... "Sinceramente, contesta el presidente de honor del PP, no. Si hubiera querido seguir mandando me hubiera quedado. Lo que tengo son muchas esperanzas y una gran gratitud. Yo debo mucho a mucha gente".

Orgulloso de estas memorias -tildadas de racionales por Herrera-, las primeras de su vida, que publica con Planeta, defiende ser una persona "con sentimientos". "Pero las cosas tienen que tener un relato. No me gusta que en la política se citen los sentimientos". Y sin dar nombres, precisa: "no me gusta contar chismes, es muy fácil".

La sucesión

Aznar volvió a referirse al episodio de la sucesión. Una vez más recordó, con un Rodrigo Rato enfrente, que eligió a Mariano Rajoy porque "era el mejor candidato para el interés general de España", y que, "después de su mujer -Elvira-, no hay nadie como yo que desee más éxitos a Rajoy". "El único que no le va a pedir nada era yo. El éxito de él es el éxito de España", puntualizó.

Cataluña y el problema de los nacionalistas

El expresidente del Gobierno abordó en el corolario del acto el resultado de las elecciones en Cataluña. Primero hizo un apunte. Cuando se firmaron los pactos del Majestic, "Convergencia i Unió no era soberanista". Y tal como hizo en la entrega del Premio a la Libertad de la Fundación Faes defendió que España no se va a romper; antes se rompería Cataluña. Hay una visión de una Cataluña monolítca y única y eso es falso. Hay un soberanismo monolítico e único y eso es falso. Ahora bien, el resultado electoral que ha tenido lugar en Cataluña reproduce la mayor fragmentación política de cualquier comunidad autonómica".

"Después de esto, continuó, todo el mundo tiene que extraer conclusiones, lecciones, y uno de ellos es el nacionalismo. Esta crisis no es la primera que vivimos. Ya vivimos otra en 1934. Los nacionalistas, en líneas generales son malos para el Gobierno cuando quieren gobernar territorios que dicen que son suyos... Este órdago no se admite, pero España continúa".

Guiño a Rato

Un guiñó a un Rodrigo Rato estoico, presente en el Hotel Intercontinental de Madrid, pese a las numerosas especulaciones sobre su posible asistencia, puso broche final al acto.

¿Es verdad que Rato, Rajoy y usted se van a ir ahora a un karaoke a cantar temas de Luis Miguel?, pregunta Carlos Herrera. Risas de Aznar. "Le aseguro que no. Con Rato he hecho muchas cosas... Pero con Mariano seguro que no".

Un público entregado

Un público entregado cerró el acto con una ovación. Allí se encontraba el presidente Mariano Rajoy, que acudió junto a Aznar, la esposa del expresidente, Ana Botella, Lucía Figar, Ignacio González, Carlos Floriano, Albert Fabra, Ana Pastor, José Manuel Soria, Eduardo Zaplana, Cayetana Álvarez de Toledo, Maria del Mar Blanco, Ignacio Astarloa, Álvarez del Manzano, Cristina Cifuentes, Juan José Lucas,  Josep Piqué, Gloria Lomana, Luis María Anson, Florentino Pérez, Fernando Fernández Tapias y esposa...