España
¿Qué sabía del 11-M Roberto Flórez, el supuesto 'agente doble' del CNI?
Y ¿por qué, una vez conocida la traición de Roberto Flórez García, no interrogó el CNI a su ex agente en una casa segura sobre todos y cada uno de los datos del servicio que pasó a Rusia, como exige el protocolo de actuación para estos casos, en vez de enviar a la Policía para que le detuviese de improviso en su casa de Tenerife el pasado lunes?
Éstas son las preguntas que se hacen medios cercanos al servicio secreto español, que no terminan de ver claras las explicaciones que ofreció el martes el director del Centro Nacional de Inteligencia, Alberto Saiz, en una conferencia de prensa sin precedentes.
No se duda de la traición del ex agente Flórez, que la justicia tendrá que dirimir, sino del hecho de hacerlo público en estos momentos, cuando el ex agente Flórez pensaba dar a conocer cierta información comprometedora.
Documentos del 11-M
"Sería interesante que el ex ministro de Defensa del Partido Popular, Federico Trillo, y el anterior director del CNI, Jorge Dezcallar, confirmasen o no si en los correspondientes relevos del ministerio y del Centro entre los temas abordados con sus sucesores se encontraba ya el caso de Flórez”, apuntan los citados medios.
Al parecer, es un caso antiguo del que el servicio de inteligencia tenía constancia y ha sido “resucitado” de forma oportuna.
En el entorno de la inteligencia española circulaba ayer la siguiente explicación: Flórez tendría en su poder informes del Centro Nacional de Inteligencia relativos a los atentados del 11-M, que habrían encendido las luces rojas en el Gobierno y en el propio servicio secreto a pocos meses de elecciones.
Y, por lo visto, el ex agente tendría también en su poder información relativa a Marruecos, a la que habría tenido acceso a través del variopinto mundo de agentes marroquíes y colaboradores que se mueven en Canarias, donde él reside.
Una prioridad informativa
El archipiélago canario es, desde hace años, una prioridad informativa de los servicios secretos marroquíes.
Dos son las razones de ese interés: por un lado, Rabat nunca ha renunciado a cierta ascendencia sobre las islas, (la más cercana se sitúa a apenas un centenar de kilómetros del Sáhara Occidental); y, de otra parte, las Canarias constituyen, desde la retirada española del Sáhara, en 1976, un activo foco de organizaciones de apoyo a la causa saharaui y al Frente Polisario.