Alicia Martín (EsPlásticos): "No existe un único material que pueda sustituir al plástico en todas sus aplicaciones"
- Entrevista publicada en la revista Agua y Medio Ambiente
- "Es crucial que tengamos un marco jurídico neutro desde el punto de vista tecnológico que permita que se fomenten todas las tecnologías que tenemos a nuestro alcance"
- "La entrada incontrolada en la UE de plásticos y productos que dicen llevar material reciclado ha puesto en riesgo la rentabilidad de algunas plantas"
Inés Oria
Con una aportación del 2,1% al PIB nacional y del 15,9% al industrial, el sector español de los plásticos genera en España una cifra de negocio de 34.695 millones de euros y emplea un total de 447.566 personas, unas cifras que lo posicionan como un pilar clave de la economía nacional y un potente aliado para el desarrollo de numerosas soluciones utilizadas en diferentes ámbitos industriales.
No obstante, el plástico enfrenta retos relacionados con la regulación, la sostenibilidad, la descarbonización y la mejora en la gestión de los residuos. La plataforma EsPlásticos, que engloba a los principales actores de la cadena de valor en España, acaba de presentar la 'Estrategia de la Industria Española de los Plásticos', una hoja de ruta que traza el camino para desarrollar un sector más sostenible, competitivo e innovador que contribuya a reforzar la autonomía estratégica del país.
¿Cuáles son los objetivos y líneas de actuación que plantea la Estrategia de la Industria Española de los Plásticos?
La Estrategia tiene como objetivo consolidar al sector como un pilar clave de la economía nacional y europea, asegurando su evolución hacia un modelo más sostenible, competitivo e innovador. Para ello, se han definido varias líneas de actuación prioritarias como son el impulso de la economía circular mediante el fomento del reciclaje avanzado; el ecodiseño y el uso de materias primas alternativas; la reducción de la huella de carbono, promoviendo la eficiencia energética y el uso de energías renovables en la producción; conseguir una armonización regulatoria para garantizar un marco estable y competitivo que permita a las empresas operar con mayor seguridad jurídica, y fomentar la innovación y la digitalización, con inversiones en I+D+i para mejorar procesos de producción, reciclaje y trazabilidad de materiales.
Por último y no menos importante, esta Estrategia también prioriza el capital humano a través de la formación y capacitación para asegurar que la industria cuente con el talento necesario para afrontar los retos del futuro.
¿Qué inversión se necesitaría para abordar esta transformación y qué beneficios aporta a las empresas?
La transformación del sector está requiriendo una inversión significativa en tecnologías de reciclaje, ecodiseño y procesos productivos más sostenibles. Se estima que será necesario movilizar varios miles de millones de euros en la próxima década si queremos hacer realidad nuestra visión de conseguir una industria circular, climáticamente neutra y competitiva.
Estas inversiones ayudarán a las empresas a conseguir mayor competitividad internacional; a acceder a nuevos mercados y oportunidades de negocio en sectores estratégicos como la automoción, las energías bajas en carbono, la construcción y la sanidad, y optimizar costes a largo plazo, gracias a la eficiencia energética y el aprovechamiento de materiales reciclados.
Pero para poder acometer dichas inversiones, es vital que Europa refuerce su competitividad. No podemos pedir a los sectores industriales que compitan con otras regiones del mundo que a menudo producen con estándares de sostenibilidad y seguridad inferiores a los de la UE y que a la vez inviertan en una transición climática.
¿Qué medidas plantea el documento para reducir la huella de carbono de los productos plásticos?
Para reducir la huella de carbono del sector, la Estrategia contempla el desarrollo de plásticos de menor impacto medioambiental sustituyendo progresivamente los plásticos de origen fósil por aquellos fabricados a partir de materias primas alternativas como la biomasa sostenible, de reciclado o la captura y uso de carbono, además de la incorporación de energías renovables en la producción.
También es necesario promover un reciclaje avanzado tanto mecánico como químico, así como optimizar el transporte y la logística, reduciendo las emisiones en toda la cadena de valor. Por último, creemos que el ecodiseño es parte también de estas medidas como por ejemplo para fomentar la producción de envases y productos más ligeros y con mayor capacidad de reutilización e incluso de reparación.
¿Cómo está impactando en el sector la prohibición de plásticos de un solo uso y otras regulaciones que se están aprobando en Europa en los últimos años?
El sector ha sabido anticiparse a estas regulaciones adaptando su producción e invirtiendo en soluciones alternativas. Sin embargo, la regulación en materia de plásticos de un solo uso ha generado desafíos en la adaptación de materiales y costes para muchas empresas, especialmente las pymes, y teniendo en cuenta que el 99% de las empresas de nuestro sector son pymes e incluso mico-pymes, estas regulaciones resultan un reto de tremenda magnitud.
No obstante, la industria sigue trabajando en nuevos materiales, tecnologías de reciclaje y estrategias de reutilización para cumplir con las normativas sin comprometer la funcionalidad y seguridad de los productos y las personas. El plástico se ha convertido en un material clave para sectores como la construcción, las telecomunicaciones, la automoción o la medicina.
¿Qué iniciativas está llevando a cabo la industria para crear nuevas materias primas sostenibles? Actualmente, ¿son rentables estas soluciones?
La industria está desarrollando bioplásticos de origen renovable, plásticos reciclados de alta calidad y plásticos que provienen de la captura de carbono y, aunque algunas de estas soluciones todavía son incipientes o pueden presentar costes más elevados que los plásticos tradicionales, la innovación, el desarrollo tecnológico y la economía de escala están reduciendo esta brecha, haciendo que sean cada vez más rentables y viables.
¿Cómo ha cambiado el ciclo de vida de los productos en los últimos años y qué perspectivas hay en este sentido a medio plazo?
El ciclo de vida de los productos se ha hecho mucho más circular y sostenible a través del ecodiseño, tanto de productos como de materiales. Me refiero a plásticos biobasados o hechos a partir residuos, lo que nos permite ir sustituyendo gradualmente a los plásticos de origen fósil. También gracias al diseño de productos reutilizables y mas reparables. Y, por supuesto, a un mayor uso de plásticos reciclados y reciclables.
Estamos trabajando para que el ciclo de vida de los productos cada vez tenga una menor huella de carbono; las perspectivas son de seguir avanzando en este sentido para ofrecer unos plásticos lo más circulares posible.
España recicló en 2022 un 41,2% de envases de plástico pero la tasa lleva varios años sin subir. ¿Qué medidas sería necesario implantar para incrementar este porcentaje y qué impacto tendría armonizar la regulación entre las diferentes tecnologías?
Es importante saber que en 2022, por Directiva europea, hubo un cambio de metodología para contabilizar las tasas de reciclaje. Es decir, se pasó a tomar como punto de cálculo un punto mucho mas aguas abajo en el proceso de reciclaje, lo que automáticamente implicó una bajada en las tasas de reciclaje.
Aún así, no cabe duda de que se pueden mejorar estos porcentajes. Para ello, es importante incrementar las recogidas de residuos, mejorar los sistemas de separación y clasificación de los diferentes flujos de residuos. En definitiva, avanzar hacia un sistema de gestión de residuos mas adaptado a la economía circular.
En cuanto a armonizar regulaciones, el impacto sería positivo. Es crucial que tengamos un marco jurídico neutro desde el punto de vista tecnológico que permita que se fomenten todas las tecnologías que tenemos a nuestro alcance para reciclar la mayor cantidad de residuos.
De hecho, una de las palancas de circularidad identificada en la Estrategia es el impulso del reciclaje mecánico y químico, tecnologías complementarias cuyo desarrollo necesita de importantes inversiones que necesitan de una seguridad jurídica para llevarse a cabo.
España es el país con mayor capacidad de reciclaje de plásticos en Europa aunque en los últimos años se ha experimentado un estancamiento de la demanda de plásticos reciclados que ha provocado una considerable caída de los precios. ¿Está en peligro la viabilidad de las instalaciones de reciclaje en nuestro país?
A pesar de ser el país con mayor capacidad de reciclaje en Europa per cápita y el segundo en capacidades totales, la pérdida de competitividad de Europa y la entrada incontrolada en la UE de plásticos y productos que dicen llevar material reciclado ha puesto en riesgo la rentabilidad de algunas plantas.
Para garantizar la viabilidad de estas instalaciones es necesario fomentar la demanda de plásticos reciclados europeos mediante incentivos y regulaciones, así como garantizar que las exigencias que se le imponen a productos europeos también apliquen a los importados.
Actualmente, ¿existe una alternativa al plástico que sea más sostenible?
No existe un único material que pueda sustituir al plástico en todas sus aplicaciones. Cada material tiene su propio impacto ambiental, por lo que el objetivo debe ser optimizar el uso del plástico con soluciones más sostenibles y eficientes y que la elección de materiales esté siempre basada en datos científicos y en el análisis de ciclo de vida. Si no, corremos el riesgo de sustituir los plásticos por materiales con huellas ambientales muy superiores.
La percepción pública del plástico ha sido objeto de debate constante y se posiciona como uno de los retos más significativos del sector. ¿Qué iniciativas prevé la industria para mejorar este aspecto de cara a la ciudadanía?
Como he mencionado antes, siempre debemos basarnos en la evidencia científica para tomar decisiones y ese es nuestro cometido, poder trasladar campañas divulgativas sobre los materiales plásticos refrendadas por los datos, ser totalmente transparentes a la hora de gestionar los residuos y el reciclaje y, por supuesto, promocionar todos aquellos casos de éxito en economía circular que realmente están creando un impacto positivo.
Un dato que la población aún desconoce sobre este sector es su deslocalización y su capacidad para la creación de empleo de calidad a lo largo de todo el territorio español. Con esto, la industria de los plásticos está contribuyendo a la lucha contra la despoblación en amplias zonas de nuestro país; recordemos que genera empleos directos a más de 97.000 personas, alcanzando los 447.566 empleos totales incluyendo los indirectos e inducidos. Actualmente, la industria cuenta con 3.700 empresas, de las cuales el 99% son pymes.
¿Cómo puede el sector contribuir a la autonomía estratégica de Europa?
Uno de los puntos más importantes será la producción de plásticos y materiales reciclados en la UE para reducir la dependencia de importaciones, pero también el desarrollo de tecnologías propias de producción y reciclaje y, por supuesto, la colaboración con sectores clave como la sanidad, la automoción y la energía para garantizar materiales y productos críticos en Europa.