Asturias acusa la falta de competencia con la gasolina y el diésel más caros de la península

Asturias es uno de los referentes del turismo en la cornisa cantábrica y, este verano, los turistas transitarán por su gastronomía, sus municipios y también por las gasolineras más caras de la península. El último boletín de la distribución de carburantes de la CNMC pone el foco en el Principado, que suma casi un año y medio con el precio de la gasolina 95 más alta, en torno a los 1,70 euros/litro; y un año con el coste del gasóleo A más caro de la España peninsular, rondando los 1,58 euros/litro.

El regulador apunta a que la anomalía asturiana se debe a la proliferación de grandes grupos petroleros en la provincia, como Cepsa, BP o Repsol; junto a la falta de distribuidoras independientes y low-cost que tiren del precio a la baja.

Asturias cuenta, por lo general, con un menor porcentaje de pequeñas gasolineras. La ratio en el conjunto de la península y Baleares se sitúa en el 45,9%, mientras que en la comunidad esa proporción cae al 33,1%. Además, sobre esas estaciones —que suman 83 puntos— tan solo hay entorno a un 12% consideradas low-cost, como Ballenoil o PetroPrix —10 establecimientos—.

Las pequeñas marcas han crecido un 15% en los últimos años en la comunidad, pero en menor proporción que en el resto de España —en el que crecieron un 24% en ese mismo periodo—. La CNMC remarca esa relación entre un menor número de estaciones de servicio de marcas pequeñas y los precios, y asegura que en aquellos municipios donde el valor de los carburantes son más caros la presencia de estas marcas independientes es prácticamente nula. Por otro lado, los pueblos y ciudades con los precios del carburante más barato muestran una mayor penetración de estaciones pequeñas.

Por otro lado, la proporción de gasolineras de grandes grupos es superior a la del resto del territorio. Repsol tiene una implantación del 32,3% (81 estaciones), frente a un 26,3% en el resto de provincias españolas; Cepsa cuenta con un 13,9%, frente a un 11,8% en la península y Baleares; y Galp suma el 10% de las gasolineras asturianas, frente a un 4,4% en el resto de España. La dinámica es similar con marcas como Disa, Esergui y Kuwait Petroleum.

La provincia más cara

Asturias ha sido una de las autonomías que ha mantenido unos precios de la gasolina y el diésel históricamente más altos. No obstante, desde 2023 la brecha con respecto al resto de las gasolineras españolas ha aumentado hasta alcanzar un máximo de 5,7 céntimos el litro este mayo.

Según el regulador, esto responde a que las bajadas de precios en el Principado son de menor calibre que en resto de España. El motivo, apunta, es un "estancamiento" de la red, que ha tenido un ritmo de crecimiento de la red más lento con respecto al de otras provincias, sobre todo en lo referido a gasolineras independientes.

Otro factor que pone de relieve Competencia es la mayor concentración de puntos de suministro en carretera y autopistas —un 44,2%frente al 36,4%del resto de la península—. CNMC destaca que es precisamente en estas estaciones donde el precio de los carburantes es mayor.

Más cara y barata

En el análisis del mercado de las gasolineras de mayo, CNMC también destaca cuáles son los puntos donde la gasolina es más cara y más barata. En Cullera (Valencia) está la estación con el precio más bajo para la gasolina 95, de la marca Plenoil, con 1,411 euros el litro.

Para el gasóleo A, la estación más económica fue la de Buñuel, en el municipio del mismo nombre de Navarra, con 1,168 euros el litro. La más cara en ambos hidrocarburos fue la estación de servicio Mirasierra, en Baza (Granada), con 1,995 euros/litro en gasolina y 1,95 euros/litro el diésel.