Sindicatos destacan seguimiento y empresarios denuncian piquetes
Madrid, 7 nov (EFECOM).- FIA-UGT y Fiteqa-CC.OO. resaltaron hoy el "mayoritario" seguimiento de la primera jornada de huelga de gasolineras, que cifraron en el 70 y el 75 por ciento, respectivamente, mientras que los empresarios denunciaron la creciente presión de los piquetes a medida que avanzaba el día.
En declaraciones a Efe, el coordinador del sector de estaciones de servicio de FIA-UGT, Miguel Angel Pacheco, calificó la respuesta de los trabajadores en toda España de "realmente buena", con cifras que han crecido durante la jornada y confía en que mañana se repitan los mismos resultados.
El responsable de hidrocarburos de Fiteqa-CC.OO., Alfredo Orella, valoró el seguimiento obtenido y la ausencia de incidentes destacables.
Según los datos de FIA-UGT, la huelga ha sido secundada por el 70 por ciento de los empleados de las gasolineras, cifra que Fiteqa-CC.OO. eleva hasta el 75 por ciento, sin incluir las 1.811 estaciones de servicio que han permanecido abiertas para cumplir los servicios mínimos fijados por el Ministerio de Industria.
Los empresarios, que no han dado cifras de seguimiento, cuestionan los datos de los sindicatos y han denunciado la presión creciente de estos a medida que transcurrían las horas.
El portavoz de la Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (CEEES) -asociación que agrupa a las gasolineras independientes y abanderadas-, José Antonio Torres, que por la mañana calificaba el comportamiento del comité de huelga de "exquisito", criticó la presencia física "amenazante" de los piquetes que obligó al cierre en lugares como Logroño, Vigo y Pontevedra.
Por su parte, el presidente de la Agrupación Española de Vendedores de Carburantes y Combustibles (Aevecar) -que representa a las empresas petroleras-, Alejandro Moratilla, aseguró a Efe que los servicios mínimos se han cumplido y evitó "entrar en una guerra de cifras con los sindicatos" sobre el respaldo de los trabajadores a la huelga.
FIA-UGT ha anunciado que presentará denuncias ante la Inspección de Trabajo por la actitud de algunos gestores y grandes empresas, que han suplido a los empleados en huelga con familiares, contratados temporales, personal de libranza o encargados.
En cuanto al futuro, Pacheco dijo que las dos partes tienen "la obligación" de hablar cuando terminen las dos jornadas de movilizaciones, aunque aseguró que la propuesta de la patronal les deja "un margen de maniobra escaso".
Orella se mostró optimista sobre el futuro, aunque calificó el último encuentro en el Ministerio de Trabajo de "frustrante" y no descartó nuevos paros en diciembre si las patronales no modifican su postura.
Moratilla dijo que a partir del jueves intentará fijar una reunión para lograr un acuerdo y buscar algún mediador para tratar con los sindicatos, que podría ser el Ministerio de Trabajo.
Según los datos suministrados por FIA-UGT, las Comunidades Autónomas con mayor seguimiento, han sido Asturias, Extremadura, Aragón, Castilla y León y Galicia, con el 90 por ciento.
También por encima de la media se situaron Madrid y Andalucía, con el 85 por ciento de los trabajadores, y La Rioja (80 por ciento).
En la Comunidad Valenciana, donde sólo están afectadas las estaciones de Campsa, reguladas por el convenio nacional, las movilizaciones han sido secundadas por el 70 por ciento, idéntica cifra que en Cantabria.
El seguimiento estuvo entre el 60 y el 65 por ciento en Murcia, Castilla-La Mancha, Cataluña, Canarias y Baleares, mientras que en el resto (Ceuta, Melilla, País Vasco y Navarra) fue del 50 por ciento.
La huelga tiene ámbito nacional, excepto en las provincias de Guipúzcoa y Vizcaya, donde las gasolineras tienen convenio propio, mientras que en la Comunidad Valenciana, sólo están convocadas las estaciones de servicio adheridas al convenio nacional.
UGT y CCOO reclaman un convenio con tres años de vigencia, subidas salariales del IPC real más 0,3 puntos en 2006, 0,4 en 2007 y 0,5 en 2008, una reducción de ocho horas en la jornada anual, hasta 1.760 horas, y un plus de 60 euros por festivo trabajado y 9 euros por cada hora extraordinaria. EFECOM
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