El Gobierno de Irlanda nacionaliza el Anglo Irish Bank tras un escándalo contable

El gobierno de Irlanda anunció el jueves por la noche la nacionalización del banco en dificultades financieras Anglo Irish Bank. "El gobierno decidió, tras haber consultado con el consejo de administración de Anglo Irish Bank, dar pasos para que la entidad quede en manos del Estado", declaró el ministro de Finanzas, Brian Lenihan, en un comunicado.

Lenihan precisó que el plan de 1.500 millones de euros decidido el 21 de diciembre para recapitalizar el banco no se llevará a cabo porque la posición de la entidad se debilitó desde esa fecha. Esa recapitalización formaba parte de un plan anunciado por el gobierno para inyectar 5.500 millones de euros (más de 7.650 millones de dólares) en los tres principales bancos del país, es decir, el Anglo Irish Bank, el Banco de Irlanda y el Allied Irish Banks.

Escándalo contable

El ministro justificó la nacionalización del Anglo Irish Bank afirmando que el escándalo vivido por la entidad en diciembre causó "serios daños a su reputación". En diciembre, Sean FitzPatrick, presidente y ex director general del Anglo Irish Bank, presentó su dimisión después de que se descubriera que disimuló un préstamo de 87 millones de euros que recibió del banco.

FitzPatrick, que fue director general del banco durante casi dos décadas antes de convertirse en su presidente en 2005, transfirió temporalmente durante ocho años, hasta 2007, los préstamos concedidos por el banco a miembros de su dirección a una sociedad inmobiliaria para que el nombre de los destinatarios de esos préstamos no aparecieran en las cuentas de la institución.

El director ejecutivo del grupo Anglo Irish's, David Drumm, dimitió a continuación, afirmando que las noticias sobre los préstamos ocultados hicieron "apropiada" su salida de la empresa.

Anglo-Irish Bank es uno de los seis bancos cubiertos por un plan gubernamental de recapitalización por un monto de 10.000 millones de euros ante sus dificultades por la crisis financiera mundial.

El anuncio de la nacionalización no afectará a las actividades y los empleados del banco, cuya acción estará suspendida en la bolsa irlandesa el viernes. El Parlamento podrá aprobar la medida el martes.