Las ventas de Almirall se hunden en EEUU por un fraude de las farmacias
Alberto Vigario
La firma reduce su previsión de ingresos un 10% y el valor cae en bolsa un 24%
La farmacéutica Almirall ha detectado un grave problema con sus ventas en EEUU, que están afectando a la marcha de todo su negocio en este año. La compañía de los hermanos Gallardo tuvo que avisar ayer al mercado de que sus previsiones de ingresos y beneficios para el cierre del año se reducirán al menos un 10 por ciento por la marcha del negocio en Norteamérica.
En concreto, Almirall reconoce ya una caída de las ventas de más del 30 por ciento en las farmacias de EEUU que, en buena parte, viene dado por un fraude, que ya sido detectado por la compañía.
El engaño procede, según reconoció la propia Almirall, del llamado Programa de Asistencia al Paciente, un sistema utilizado en las farmacias de EEUU, por el que las propias compañías farmacéuticas costean buena parte del precio de los medicamentos a las personas que acreditan falta de recursos para comprar fármacos de marca.
Pues bien, la compañía española asegura haber detectado "un nivel significativo en la adjudicación inadecuada de tarjetas" para acceder a este programa. De hecho, Almirall ya ha emprendido acciones legales contra algunas farmacias a las que considera responsables o participantes de este engaño. La compañía, además, afirma haber incrementado la supervisión para poder atajar el problema, con un ajuste de las reglas del programa para vigilar de cerca su uso adecuado así como una mayor visibilidad con un nuevo sistema y controles.
Las compañías farmacéuticas en EEUU suelen participar en estos programas con la intención de que lo usuarios al salir del programa de ayudas sigan confiando en la marca del medicamento frente al genérico al seguir con su medicación.
Pero éste no es el único problema que explica el descenso de sus ventas en Norteamérica. Almirall también admite por "un reequilibrio de inventarios en el canal de distribución", que tendrá un impacto de entre 25 milloens y 30 millones de euros en las cuentas solo en el primer semestre, y además advierte que el resultado de la empresa en EE UU se ha visto afectadopor la aparición de un producto genérico que compite con su fármaco Acticlate para el tratamiento del acné y que es un 10 por ciento más barato. El impacto total de estas circunstancias en los ingresos de Almirall se estiman en unos 70 millones. Con todo, la farmacéutica catalana calcula que este año registrará un resultado bruto de explotación (ebitda) de entre 140 millones y 170 millones de euros, es decir, una caída de alrededor de un 30 por ciento respecto a los 227 millones de euros de 2016. La compañía preveía que esta partida aumentase en torno a un 5 por ciento en 2017.
El consejero delegado, Eduardo Sanchiz, afirmó ayer en una reunión con analistas que en los diez años que Almirall lleva cotizando en bolsa es la "primera vez" que la compañía se ve obligada a corregir sus estimaciones.