Empresas y finanzas
"Vía Célere colocará en bolsa hasta el 60% de su capital"
- Juan Antonio Gómez-Pintado Presidente y consejero delegado de Vía Célere
Juan Antonio Gómez-Pintado creó Vía Célere a las puertas de la crisis, un factor que no le impidió convertir su compañía en una de las promotoras más solventes y activas de este país durante los últimos años. Hace apenas un mes decidió vender la compañía al fondo Värde, que ya era dueño de la recién creada Dospuntos. El empresario ha logrado integrar ambas compañías en tiempo récord y ahora trabaja con la mirada puesta en su salida a bolsa.
¿Por qué decidió vender Vía Célere?
Existen razones de negocio, como que ganas volumen y eso te facilita el acceso a mayores bolsas de suelo y a financiación diferente, además de la hipotecaria. Pero también hay motivos personales. A mis hijos no les gusta este negocio y una empresa familiar sin continuidad no tiene sentido, con lo cual la venta era absolutamente necesaria para no perder una creación de valor como la que hemos tenido todos estos años. Además, de este modo, garantizo a la plantilla entrar en una compañía más profesionalizada y con unos accionistas de nivel como Värde, Marathon, Bank of America, Barclays y Attestor.
En tan solo un mes ha llevado a cabo la integración.
Estamos yendo muy deprisa para poder empezar a sacar proyectos adelante. Antes lanzábamos entre seis y ocho al año, y este ejercicio esperamos alcanzar los 22. Es un salto muy grande. En cuanto a personal, ya estamos todos instalados en la sede de Vía Célere. Somos 200 personas, pero seguimos contratando personal. Dospuntos tenía una plantilla de 67 personas equiparada a los proyectos que estaban haciendo, pero estaba en fase de crecimiento, igual que nosotros. Si echamos cuentas en base al número de viviendas que vamos a levantar, sale una cifra escandalosa, ya que vamos a crear unos 10.000 puestos de trabajo entre indirectos y directos a lo largo del año.
¿Qué retos deben cumplir antes de la salida a bolsa y cuándo cree que se va a dar ese hito?
Seguramente daremos el paso dentro de año y medio y saldremos con un free float de entre el 60/40 por ciento. Pero nos queda todo por hacer, y ahora estoy centrado en planificar el negocio en base a los lanzamientos de las promociones para llegar al objetivo de entregar entre 2.500 y 3.000 viviendas al año.
Viendo el éxito que ha tenido Neinor en su salida a bolsa sin haber entregado una vivienda todavía, ¿qué perspectivas tienen para Vía Célere?
Al igual que le ha sucedido a Neinor- que lo ha hecho francamente bien-, y ese ha sido uno de sus éxitos, no dependerá del track record, ni de nuestros activos, sino más bien de una visión de futuro. Dependerá mucho de la situación económica general a nivel de país, de Europa y también mundial. En España todo apunta a que irá bien, y que cuando nosotros salgamos a bolsa estaremos en una situación razonablemente buena para que eso sea así.
¿Están analizando ahora nuevas compras de suelos?
Ahora mismo tenemos ya mas de un millón de metros cuadrados de edificabilidad, por lo que no me obsesiona comprar suelo. Lo que me preocupa es empezar a estructurar nuestro plan. Cuando tengamos eso, entonces planearé si tenemos que acudir a una tipología u otra y en que porcentajes.
Y en el caso de Värde, ¿seguirá analizando la compra de más promotoras?
De momento, no hay nada. Lo veremos en un futuro. Pero si eso es una fórmula para tener más suelo dentro de Vía célere, todo se estudiará.
¿Cómo valora el papel que están tomando los fondos en el mercado promotor y el que se les atribuya la profesionalización del sector?
Cuando se habla de profesionalizar se confunde el término. Si hablamos de una visión financiera, de montar una estructura más compleja a nivel financiero, sí, eso es obvio que es así. Pero si hablamos del proceso edificatorio con el fin último de entregar una vivienda a un cliente, te diría que no. De hecho, la simbiosis que se produce entre Vía Célere y Värde precisamente va en esa línea. Hemos sumado el expertise financiero de Värde, que cuenta con una estructura más compleja que la que teníamos nosotros, que basábamos nuestra financiación en crédito hipotecario, con nuestro proceso constructivo perfectamente diseñado, con una maquinaria funcionando al milímetro.
¿Puede decir que esta es la última promotora que vende?
La carrera se queda aquí -dice entre risas-. El mes que viene cumplo 48 años, tenemos este proyecto entre manos, que ya te pones en cuatro o seis años más, y no voy a ponerme a montar una nueva promotora. Descartado totalmente.