Todo a favor para que Chevron conquiste 2017
Irene Hernández
La tercera petrolera más grande del mundo es una de las favoritas del sector para los expertos de cara a este año. Tras vivir su mejor ejercicio en bolsa, ahora mira con buenos ojos la próxima presidencia de Donald Trump y el pacto de la OPEP.
Comenzó su andadura hace más de un siglo y, tras varios cambios de nombre hasta llegar al de hoy, Chevron se ha convertido en la tercera mayor petrolera del mundo por capitalización -detrás de Exxon Mobil y Shell-. La estadounidense ha conseguido hacerse un hueco entre las apuestas de los analistas por las mayores compañías dedicadas al crudo a nivel mundial. Y lo ha hecho gracias, entre otras cosas, a "su potencial de crecimiento y sus márgenes de producción de primer nivel frente al resto de sus compañeras", señala JP Morgan.
Es una de las empresas que sacará más provecho de la decisión de la OPEP de recortar la producción a partir del 1 de enero de este año. Con esta reducción, "podrían verse beneficiadas las compañías en las que la parte de extracción es más importante", explica CMC Markets, recordando que el sector es "atractivo para los analistas, que recomiendan comprar la mitad de las firmas" de este ámbito. Y Chevron es una de ellas. Los expertos de DBRS destacan su "importante perfil de producción globalmente diversificado -con no más del 20 por ciento de presencia en una sola región- que permite a la compañía lidiar mejor con la volatilidad de los precios de los productos básicos". Chevron forma parte del Eco30, la herramienta de elEconomista con los valores internacionales más atractivos, durante este primer semestre del año.
Además, Donald Trump ha defendido públicamente desde antes de proclamarse presidente de EEUU las energías fósiles, lo que "puede beneficiar potencialmente a los nombres tradicionales de gas y petróleo, entre ellos Chevron", señala Credit Suisse.
El año de la recuperación
Después de registrar pérdidas en los nueve primeros meses de 2016, y cerrar el año ganando un 87 por ciento menos que en 2015, en el presente ejercicio sus beneficios superarán los 8.000 millones de euros, según las previsiones, mientras su ebitda (beneficio bruto) se situará para este 2017 rozando los 33.500 millones de euros. Con un descenso del 40 por ciento de su deuda de aquí a 2020, la petrolera eliminará prácticamente su apalancamiento para entonces. Algo a lo que contribuirá la intención de la compañía de desprenderse en el presente año de activos por valor de 10.000 millones de dólares.
Con esto, para este 2017 su PER (veces que el beneficio está recogido en el precio de la acción) se reduce hasta las 25 veces. Para los analistas de Seeking Alpha, el entorno ideal para que la compañía vea aumentar sus ganancias este ejercicio es con el precio del petróleo en 60 dólares. Chevron tiene el objetivo de aumentar la producción en 2019 hasta un 15 por ciento respecto al pasado año.
Por su parte, se espera que el dividendo no tenga gran variación en estos años, aumentando un 3 por ciento de aquí a 2020. Unas previsiones que, sin embargo, hay que tomarse con cuidado, dada la evolución que han tenido sus beneficios y la gran parte que tendrá que dedicar al pago del dividendo. En estos años, la rentabilidad de su pago rondará el 3,7 por ciento.
Sin embargo, la diversidad geográfica de su negocio también provoca que Chevron tenga por delante un año lleno de desafíos, como señala DBRS, que cree que la petrolera "debe manejar una variedad de riesgos políticos y comerciales, incluyendo la incertidumbre respecto a la estabilidad de los sistemas reguladores, monetarios y fiscales".
Algo que podrá "soportar gracias a su perfil de riesgo financiero relativamente fuerte, con mayor flexibilidad", concluyen desde la entidad.
Su mejor año en bolsa
Chevron cuenta ahora con su mejor recomendación desde hace cuatro años, después de que en agosto del pasado ejercicio recuperara el consejo de compra.
Cerró 2016 como su año más alcista en bolsa, revalorizándose más de un 30 por ciento. Una escalada "impulsada por una recuperación de los precios del petróleo", refleja un informe de Seeking Alpha, que considera que Chevron será capaz de mantener esta subida en el largo plazo y sus acciones podrían llegar hasta los 196 dólares para 2020.
El consenso de mercado recogido por Bloomberg también considera que a sus acciones todavía les queda recorrido y les otorgan un potencial, de media, del 3,9 por ciento para los próximos doce meses, hasta los 121,88 dólares en los que sitúa su precio objetivo.
Ahora, los títulos de Chevron cotizan en la zona de los 117 dólares después de un comienzo de año algo negativo. En estas primeras sesiones cede un 1,8 por ciento, lo que le aleja de volver a conquistar sus máximos de 2014.