Bodegas Emilio Moro: "La empresa que quiera posicionarse en el sector del lujo debe considerar a México"
EconomíaHoy.mx
José Moro representa a la tercera generación a cargo de las Bodegas Emilio Moro, su familia se ha dedicado, desde 1932, a la producción y perfeccionamiento de sus vinos en la Ribera del Duero.
La visita de José a México atiende a las acciones de su Fundación, que ha instaurado un proyecto para proveer agua con calidad para beber a escuelas rurales en el estado de Chiapas.
Su empresa reporta un crecimiento en ventas de entre 10 y 15% anual en el país latinoamericano. El ejecutivo afirma que sus vinos están presentes en uno de cada dos restaurantes de alta calidad y que, con un consumo inferior a una botella por persona al año, este país ofrece posibilidades de crecer hasta un 40 en volumen de ventas, aunque, afirma, esa no es su meta principal.
"No somos una bodega que tenga aspiraciones de convertirse en la marca que más vende, queremos tener el mejor posicionamiento, esa es la estrategia de expansión en general en América Latina, se trata de un mercado claramente apetecible, porque se incorporó tarde a la cultura del vino", explica José Moro a elEconomista en la entrevista.
De acuerdo con las cifras del Consejo Mexicano Vitivinícola, en México se consumen 62,13 millones de litros por año, equivalentes a 6,9 millones de cajas, de las cuales, 4,7 millones corresponden a la oferta de importación.
El mercado de vino tiene un valor de 10.300 millones de pesos en México, apenas equivalente a poco más de 420 millones de euros, con un consumo promedio por persona de 600 mililitros al año (20,2 onzas).
"Hay una gran oportunidad para crecer la cultura del vino en México, porque el consumo va al alza, es verdad que se observan varios retos para el país y para la Región, pero lo cierto también es que todo depende de la estrategia: cualquier empresa que quiera posicionarse en el mercado de lujo debe considerar a México, sin importar los retos", afirma el empresario.
Los vinos Emilio Moro están presentes en 60 países alrededor del mundo, incluso en Asia; sin embargo, los 30 importadores del mercado estadounidense representan entre el 85 y 90% de las ventas internacionales.
Inicio de una industria
Cuestionado sobre el potencial de México como productor de vino, José Moro señala que ha probado algunos de los vinos nacionales.
"Se trata de vinos técnicamente bien producidos, pero aún hay mucho que trabajar en personalidad y carácter. Cada bodega es un mundo, México está en momento de definir sus propios procesos y empezar a consolidarlos, este crecimiento de la industria nacional será un fenómeno interesante de seguir".
México cuenta con casi 7.500 hectáreas plantadas y en producción de vino. La última cifra reportada por el Consejo Mexicano Vitivinícola era de 216 bodegas de vinificación productoras que procesaban 25.898 toneladas de uva.
Los Estados con mayor potencial de producción son Baja California, Coahuila y Querétaro. Aunque en el mapa también figuran, en menor medida, Aguascalientes, Chihuahua, Guanajuato y Zacatecas.
Regresar buenas acciones
La Fundación Emilio Moro busca poner orden a la manera en que la familia había tratado de retribuir a la comunidad los frutos del éxito de las Bodegas.
"Ya teníamos en marcha muchas acciones de apoyo a la comunidad, sin embargo, la Fundación se creó para llevar un control de los proyectos y los recursos", explica José Moro Espinosa.
En 2008, bajo el lema El vino ayuda al agua, se creó la Fundación cuyo principal objetivo es contribuir al reparto justo de los recursos de agua entre las poblaciones más necesitadas.
La causa se eligió porque el 71% de la superficie terrestre es agua, pero de ella, solamente el 3% es dulce. Además, de esa cantidad, únicamente el 0,5% es apta para el consumo humano y se requieren esfuerzos para que la distribución sea equitativa.
Entre los proyectos destaca una iniciativa con la que se apoya a escuelas en Perú, donde se destinan recursos a instalaciones que son aprovechadas por jóvenes en riesgo de exclusión social. Actualmente, en el país andino, la Fundación apoya en concreto a 30 estudiantes de entre 16 y 30 años.
Para conseguir recursos, la compañía se vale de la venta de vino y joyas en edición especial, la organización de Cenas Solidarias o Apadrinamiento de cepas en un concepto que llaman Viñedos Solidarios.
En México, el proyecto de Chiapas se desarrolla en conjunto con la Fundación Cántaro Azul. Se trata de un programa denominado Agua Segura con el cual se instalan sistemas de purificación de agua para beber en escuelas rurales; su principal fuente de abastecimiento es la captación de agua de lluvia, de esta manera se responde a las necesidades de las escuelas que no cuentan con agua entubada.
En México, el Instituto Nacional de Evaluación Educativa arroja que cuatro de cada diez escuelas no cuentan con un sistema apropiado de drenaje y agua entubada.
De acuerdo con datos del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, las niñas de las regiones más vulnerables del mundo pasan seis horas al día acarreando agua para sus escuelas, hogares y comunidades.