Empresas y finanzas
El mercado no se aclara con BBVA: ¿será víctima o verdugo dentro de su sector?
"La estrategia correcta es que alguien tome la iniciativa de forma efectiva", dijo Francisco González ayer, una frase que descarta la fusión entre iguales pero que deja la puerta abierta a comprar o ser comprado siempre que haya un actor dominante. Y en el supuesto de ser comprado, como señalan desde Caja Madrid, las palabras del directivo "se pueden interpretar en el sentido de que en el caso que otra entidad quiera hacerse con el control de BBVA deberá pagar una prima de control, lo que podría situar el precio de las acciones de BBVA un 20% por encima de su valor actual".
"Estimamos que hay un 80% de probabilidades de que una entidad lance una opa sobre BBVA aunque no parece que el mercado esté descontando este escenario debido a que la prima que se pagaría sería relativamente baja", apuntillan desde la caja de ahorros. El actual valor de mercado de BBVA ronda los 60.300 millones de euros, así que esa cifra más una prima del 20% elevaría el precio de la operación por encima de los 72.000 millones.
Dr. Jeckill y Mr. Hyde
Pero la situación de BBVA comienza a ser confusa, ya que hasta hace poco el segundo banco español era pintado como víctima y ahora se perfila como verdugo. Unos días es el Doctor Jeckill y otros se convierte en Mister Hyde, y eso desconcierta a los inversores, que deben estar ojo avizor para no dejarse por el camino parte de lo ganado o para no perderse una subida adicional.
¿Qué significa que el banco vaya a considerar cualquier oportunidad de crecimiento que merezca la pena? "Entendemos que esto sitúa a BBVA más como comprador que como comprado, lo cual tendería a enfriar ligeramente el valor", apuntan en Bankinter. Los rumores más insistentes han vedido de Italia, un mercado por el que BBVA no esconde su predilección.
"No debemos sorprendernos si aparecen rumores de vez en cuando", dijo González. "La mayor parte de los rumores no tienen ningún fundamento. Algunos de ellos son sorprendentes", agregó. Lo claro es que teóricamente hay tres escenarios: uno en el que BBVA compra y sus acciones bajan y otro en el que es comprado y sus acciones suben. El tercero sería aquel en el que todo sigue igual, pero la lógica apunta hacia la cocentración, bien comprando o siendo comprado.