Empresas y finanzas

Gobierno quiere las cuentas exactas de Abengoa y dice que necesita un socio industrial



    MADRID (Reuters) - La delicada situación que atraviesa Abengoa se ha convertido en un asunto de Estado, pero el Gobierno español quiere conocer la radiografía exacta de las finanzas del grupo de ingeniería y renovables antes de valorar eventuales medidas de ayuda que en ningún caso serán contrarias a la normativa europea.

    "Lo primero es que tengamos la información precisa de cuál es la situación ... dónde está la deuda ubicada y dónde están los problemas fundamentales de liquidez que está sufriendo en estos momentos ABENGOA (ABG.MC), dijo el viernes el ministro de Economía Luis de Guindos.

    Guindos -que llamó la atención sobre la compleja estructura y la elevada deuda de Abengoa- dijo que tiene previsto abordar los problemas del grupo sevillano en conversaciones con el consejero de Economía de la Junta de Andalucía y destacó la importancia de encontrar "socio industrial" en los próximos meses.

    Abengoa solicitó el preconcurso de acreedores esta semana después de ver frustrado el acuerdo por el que Gestamp iba a entrar en el capital de la compañía con una inyección de 350 millones de euros. El grupo industrial vasco tuvo que dar marcha atrás al convencer a los bancos para seguir aportando liquidez adicional.

    De Guindos dijo que la actitud del Gobierno será "constructiva", pero advirtió que había que tener en cuenta las limitaciones europeas para las ayudas de Estado y la limitada exposición del Instituto de Crédito Oficial a la deuda de Abengoa: 130 millones frente a una exposición bancaria total que superaría los 20.000 millones de euros.

    Teniendo en cuenta la exposición de otras entidades públicas (Cofides y Cesce) indicadas por el ministro, el Gobierno central tiene una exposición a la compañía andaluza de 415 millones de euros, a la que habría que sumar otros más de 400 millones de euros de la exposición de la nacionalizada Bankia, según una fuente bancaria.

    De Guindos, que rechazó cualquier responsabilidad de la reforma energética del Ejecutivo en los problemas financieros de un grupo que factura más del 90 por ciento fuera de España, consideró que la empresa es todavía un proyecto empresarial "viable e importante" e instó a todas las partes implicadas a hacer un esfuerzo por su continuidad.

    Abengoa tiene más de 24.000 empleados, de los que 7.000 se encuentran en España y la mayor parte de estos últimos en su cuna andaluza.

    Una fuente con conocimiento de la situación dijo el viernes que Abengoa -que hoy anunció cambios en su cúpula directiva, comenzará la semana que viene las reuniones con la banca acreedora.

    De Guindos dijo que el Gobierno y la Junta de Andalucía seguirán cooperando con los bancos, pero insistió en la dimensión internacional y la enorme complejidad de la estructura de deuda del grupo todavía controlado por la familia Benjumea.

    "La banca española solamente tiene el 40 por ciento del total de la deuda bancaria. Y aparte de la deuda bancaria existen emisiones en los mercados de capitales y existe una deuda importantísima con proveedores", dijo.